Atlixco. La falta de frenos en un viejo tráiler y la ponchadura de una llanta en un autobús de la empresa ORO-ERCO provocaron ayer dos aparatosos percances viales en este municipio dejando como saldo una persona fallecida y al menos cinco lesionados.
Ambos siniestros ocurrieron con apenas 20 minutos de diferencia. Uno alrededor de las 9:30 y el otro antes de las 10 de la mañana curiosamente en una carretera conectada entre sí.
El peligro
Un autobús amarillo de la empresa ORO-ERCO salió de la terminal de esta ciudad con destino a Izúcar de Matamoros. 15 minutos después, y al llegar a la altura de la junta auxiliar de La Trinidad Tepango en los límites de Atlixco y Huaquechula, de plano el chofer perdió el control por completo de la unidad.
El motivo, según las primeras investigaciones al respecto, fue la pérdida repentina de una de las llantas delanteras provocando casi de inmediato un choque frontal con el letrero de bienvenida de esa comunidad rural.
Luego del impacto el autobús quedó varado a la mitad de la carretera estatal de Atlixco a Izúcar de Matamoros y con la parte de enfrente destruida totalmente.
A pesar de la complicada situación, los pasajeros lograron salir y al menos cuatro de ellos requirieron atención prehospitalaria en el lugar de los hechos para después trasladados a hospitales cercanos. En tanto, el conductor quedó en calidad de detenido para fincar o deslindar responsabilidades.
A dos kilómetros y medio de distancia hacia el norte, concretamente al final de la vía Atlixcáyotl y en el entronque con el camino de Atlixco-Izúcar de Matamoros, un viejo tráiler literalmente voló durante varios metros, tras colisionar con un cerro, al quedarse sin frenos.
El carro pesado terminó deshecho a la mitad de la cinta asfáltica de éste segundo sitio mencionado. A su paso atrapó entre los fierros retorcidos a un motociclista cuyo dueño salvó la vida de milagro. Aunque terminó en el hospital con pronóstico reservado.
Y una mujer de la tercera edad y su acompañante podrán contarlo porque su Jetta gris se detuvo a tiempo y únicamente sacaron rayones en el cofre. Ambas pasaron una severa crisis nerviosa durante varios minutos.
Sin embargo, el piloto y su acompañante no corrieron con la misma suerte. El responsable del tráiler se debate entre la vida y la muerte en un nosocomio de la capital poblana. Y el copiloto perdió la vida al salirse en el momento de aterrizar el camión en el suelo. Ambos eran de originarios de San Andrés Cholula y trasladaban toneladas de adoquines y blocks.
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