Más de 200 comerciantes y franeleros adheridos a la UPVA 28 de Octubre fueron los que resultaron afectados con el operativo del gobierno del estado para quitarle el control a esta organización del estacionamiento del estadio Cuauhtémoc, afirmó Rubén Sarabia Sánchez, alias “Simitrio”, asesor general.
En conferencia de medios, afirmó que en esta movilización el gobierno hizo uso no solo de la fuerza pública, sino también de “pandilleros” de barrios como Xanenetla, así como de organizaciones “gobiernistas” como Antorcha Campesina, que -según él- será la beneficiaria de la salida de la UPVA 28 de Octubre.
Sarabia Sánchez señaló que los trabajadores de la zona forman parte de familias con hasta cinco generaciones que vivían de acomodar automóviles o vender comida afuera del inmueble.
“Había muchos estudiantes de 15 o 16 años. Familias enteras se quedan sin empleo por un operativo sin previo aviso contra la organización”, expuso.
Criticó el uso excesivo de la fuerza, señalando que participaron el Ejército Mexicano, la Marina Armada de México y grupos delictivos menores de los barrios como Xanenetla.
“Usaron a elementos de la narcodelincuencia, delincuencia común, integrantes de Antorcha Campesina. Ese es un ejército total. Para afectar a 200 de nuestros integrantes. Quieren entregar esas fuentes de trabajo a empresas de gran capital, como los que administran la empresa Ruta”, expresó.
Afirmó que una de las razones detrás del operativo es que la UPVA 28 de Octubre ha apoyado a organizaciones que se oponen a los proyectos de muerte en la Sierra Norte.
“Durante la ocupación de los estadios le pedimos diálogo al secretario de Gobernación. Él dijo que si queremos diálogo, que corrijamos nuestras posturas de prensa sobre la guardia que estaba asignada a mi cuidado”, denunció.
Simitrio insistió en que el operativo tuvo como fin favorecer a grupos como Antorcha Campesina, los cuales, según sus palabras, cobraron hasta 200 pesos por permitir el estacionamiento en la zona externa del estadio.
“En la periferia del estadio trabajaron grupos de esta organización. Se observaron en la zona del llamado monumento al taco”, concluyó.