Esta mañana, organizaciones defensoras de derechos humanos del estado denunciaron las amenazas de las que ha sido objeto el párroco José Martín Hernández Martínez, por parte de las autoridades del municipio de Huitzilan de Serdán, bastión antorcha.
La Red de Derechos Humanos, el Colectivo Ciudadano “Carrillo Puerto” y la Asociación “Joel Arriaga” revelaron que el presidente municipal Manuel Hernández Pasión y el líder antorchista de la localidad, Adalid Córdoba Muñiz, pretenden expulsar al cura por hacer trabajo social en las comunidades.
En rueda de prensa, Fernando Cuellar Muñoz, de la Asociación “Joel Arriaga”, informó que el municipio de Huitzilan se ha convertido en tierra de nadie.
“Antorcha Campesina se aprovecha de la pobreza que existe en la Sierra Norte, se hacen ricos a partir de la pobreza”, señaló.
Algunos campesinos procedentes de este municipio, gobernado desde hace casi tres décadas por el movimiento Antorcha Campesina, explicaron a los reporteros que el sacerdote realiza reuniones pastorales con los indígenas y los exhorta a salir adelante.
Dijeron que esta situación es la que enfurece a los antorchistas, quienes quieren mantener con el yugo de la ignorancia al pueblo.