El secretario de Gobernación en el estado de Puebla (Segob), Samuel Aguilar Pala, negó este jueves que la renuncia del alcalde suplente de Ciudad Serdán, Rafael Brenes Nepomuceno, sea por amenazas del crimen organizado, tras la detención del presidente municipal Uruviel González Vieyra.
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El funcionario no descartó que el Congreso del estado nombre a un Concejo Municipal, debido a que nadie quiere asumir la administración del ayuntamiento.
En entrevista, confirmó que Rafael Brenes, suplente del edil detenido, renunció a asumir el cargo, por lo que una regidora fue designada en su lugar, quien también rechazó la responsabilidad.
En ese sentido, adelantó que sostendrá una reunión con los regidores que integran el Cabildo de Ciudad Serdán, para analizar la situación.
A pesar de ello, afirmó que no existe ingobernabilidad y que se están garantizando los servicios públicos en el municipio.
Aguilar Pala dijo que la Ley Orgánica Municipal permite la instalación de un Concejo por parte del Poder Legislativo, o bien la designación de una persona que administre el ayuntamiento.
Sin embargo, explicó que, antes de iniciar ese proceso, dialogará con los regidores para explorar posibles soluciones.
En cuanto a las razones que estarían detrás de la renuncia al cargo, el secretario evitó atribuirlas a amenazas o presiones de grupos afines a González Vieyra, que estarían vinculadas al crimen organizado.
A su juicio, Samuel Aguilar consideró que la principal causa es la falta de acuerdos entre los regidores.
“El problema es que no hay consenso dentro del cabildo para hacer una designación adecuada”, sostuvo.
Por lo tanto, comentó que esta situación “genera incertidumbre en sus decisiones, pero hoy mismo definiremos una ruta con base en la conversación que tengamos con ellos”.
El pasado 7 de marzo, los hermanos Uruviel y Giovanni González Vieyra, alcaldes de Chalchicomula de Sesma y Tlachichuca, respectivamente, así como su padre Ramiro González, fueron detenidos por agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE), acusados de varios delitos, entre ellos por su posible vínculo con bandas criminales.
El tercer hermano, Ramiro González Vieyra, presidente municipal de San Nicolás Buenos Aires, se dio a la fuga debido a que unos 50 pobladores evitaron su captura.