En conferencia de medios, los consejeros encabezados por el secretario José Armando Huerta Mejía, informaron que lo anterior representa un problema sanitario, debido a que la empresa se niega a desazolvar las alcantarillas en donde corre una gran cantidad de aguas tratadas.
Los propios administradores de la Central de Abasto informaron que las aguas negras corren hacia la parte sur del centro de abasto, y se concentran en cuatro puntos y una planta de tratamiento.
Aunque afirmaron que hasta el momento no ha habido un desbordamiento de aguas negras, reconocieron que existe tal posibilidad.
En un recorrido por los pasillos de la central de abasto se pudieron observar las alcantarillas con aguas negras a menos de la mitad de su capacidad, a una semana del corte del servicio.
Sin embargo, si no se reconecta a la brevedad se corre el riesgo de que las aguas sin tratar se filtren hacia las calles como sucede en la 121 Poniente, donde se ubica la Universidad Pedagógica Nacional, institución a la que Concesiones Integrales le cortó el servicio por un supuesto adeudo millonario.
Se compra una pipa diaria por nave
Por la tarde, integrantes del Consejo de la Central de Abasto revelaron que, a una semana del corte del servicio de agua por parte de Concesiones Integrales, en la mayor parte de las bodegas de la Central de Abasto de Puebla compran una pipa diaria de agua para atender la demanda del líquido.
En conferencia de medios detallaron que esta es la realidad que viven la mayor parte de las naves, en particular la C, donde se requiere el agua para limpiar las papas y otros perecederos.
En la conferencia algunos bodegueros detallaron que los cobros por supuestos adeudos a la concesionaria ascienden hasta los 75 mil pesos por comerciante, sin que la concesionaria justifique a cabalidad el cobro.
Víctor González, propietario de la bodega E49 buscó una negociación con la concesionaria para cubrir el adeudo por más de 70 mil pesos, pero ésta únicamente le ofreció un descuento de 5 mil pesos del pasivo, mismo que le parece excesivo debido a que solo ocupa 50 por ciento del inmueble.
Eva Juárez, presidente de la nave E, subrayó que la concesionaria cobra la misma tarifa de 450 pesos al mes a los comerciantes tengan o no toma de agua.
Sostuvo que en esa nave solo 50 por ciento de los locatarios cuentan con toma pese a lo cual llega el recibo a todos por igual.
Adicionalmente, refirió que la tarifa se incrementó al 100 por ciento, luego de que en 2014 Agua de Puebla obtuvo la concesión del servicio.
Sacan adeudos de hace más de cinco años
Los comerciantes del centro de abasto más importante del estado aclararon que están dispuestos a cubrir sus adeudos de agua, siempre y cuando los cobros estén justificados.
Consideraron arbitrario que se les haya cortado el servicio a todos los bodegueros, incluidos los cumplidos, quienes ya tramitan amparos contra la determinación ilegal de la firma.
Más aún, quienes tienen adeudos denunciaron que la concesionaria revivió adeudos de hace más de cinco años que ya habían sido cubiertos, con lo que los pasivos aumentaron de manera significativa.
Cayeron los primeros amparos
Adicionalmente, Huerta Mejía subrayó que un grupo de comerciantes que han cumplido con el pago de sus recibos de agua ya promovieron amparos contra los cortes por parte de Concesiones Integrales.
Subrayó que lo presentan ellos porque representa una afectación seria a sus actividades pese a que no cuentan con ningún adeudo.
Si es real el argumento por parte de la empresa en el sentido de que únicamente son cumplidos 30 por ciento de los locatarios, lo anterior equivaldría a que 150 de estos promoverán amparos contra la determinación de la empresa.