La Unión Popular de Vendedores Ambulantes (UPVA) 28 de Octubre marchó este miércoles por las calles de la capital poblana para expresar su repudio a las reformas constitucionales, que promueve el gobierno federal.
Asimismo, manifestó su rechazo a la privatización del agua potable en la capital y otros 24 municipios del interior del estado, así como a la política de represión del ayuntamiento de Puebla al sector informal de la economía.
El líder moral de la UPVA, Rubén Sarabia Sánchez “Simitrio”, expuso que la UPVA tendió una mesa de diálogo con el actual edil capitalino, Eduardo Rivera Pérez, pero éste se negó aceptarla; por el contrario, la actual administración panista no emprendió ningún programa de apoyo a los comerciantes sino que se ha dedicado a someterlos y aislarlos cada vez más del primer cuadro de la capital.
La falta de políticas públicas claras de generación de empleo por parte del estado y del ayuntamiento se reflejan en los recientes resultados del Instituto Nacional de Geografía y Estadística, que revelan que hay casi 130 mil desempleados en la entidad, la mayoría de ellos en el municipio de Puebla.
Por otra parte, “Simitrio” expuso que las reformas que propone el presidente Enrique Peña Nieto “son una auténtica traición a los mexicanos”, pues están encaminadas a fortalecer a la clase social más pudiente del país, mientras que 70 millones de mexicanos son ignorados en sus necesidades más básicas de empleo, alimentos, salud y vivienda.
En ese sentido, indicó que tanto la Unión Popular de Vendedores Ambulantes como cientos de organizaciones de la sociedad civil tienen la convicción de detener las reformas que impulsa el gobierno federal, para lo cual promueven diferentes acciones de resistencia civil pacífica.
