Cancún, QR. En el marco del Día Internacional de Las Familias, colectivos de madres buscadoras pidieron a los sicarios, a los delincuentes, que les digan en dónde están sus hijos, que cuando los maten no los embolsen porque es más difícil encontrarlos.
En una jornada que incluyó una pequeña marcha, además de la pega de fichas de búsqueda de más de una veintena de hombres y mujeres sin localizar. La presidenta del colectivo Madres Buscadoras de Isla Mujeres, Deysi Blanco, denunció que otros dos cuerpos de personas desaparecidas fueron halladas, de manera circunstancial, en las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo), sin que personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) les informe.
Afirmó que por temor, familiares de 26 desaparecidos no se han atrevido a denunciar la desaparición de su ser querido, pues delincuentes les advirtieron que si denunciaban empezaría a desaparecer, uno a uno, al resto de sus hijos y familiares. No obstante, sostuvo que en su momento ella estuvo a punto de ser levantada, fue amenazada de muerte, pero “como colectivos estamos más muertos que en vida”.
Con un pequeño grupo de cerca de una decenas de víctimas, entre ellos uno quien aseguró que a pesar de que su hijo desapareció, sus raptores siguen utilizando su celular, bajo la incapacidad de la FGE que argumentan que no lo pueden localizar; padres y madres buscadoras caminaron por la avenida Tulum hasta llegar a la Plaza de la Reforma, frente al palacio municipal, mismo sitio que horas más tarde sería utilizado por Pioneros de Cancún quienes organizaron el “Desfile Cancunense”, el cual culminará en el mismo sitio.
Deysi Blanco afirmó que en diversas ocasiones han pedido una cita con el titular de la FGE, Raciel Salazar López, para exigirle que les permita entrar al Semefo a buscar a sus familiares, pues ahí han aparecido al menos cuatro cuerpos, unos con hasta cinco años de búsqueda, pero siempre se topan con su personal quien todo les obstaculiza y se niegan a facilitarles el camino a los nuevos casos de familiares de personas desaparecidos “si no les gusta su trabajo que se larguen y que deje que llegue otro fiscal que sí quiera trabajar”.
Sobre el caso de su hija Fernanda Cayetana, Deysi Blanco, dijo que lograron que Angélcia Velázquez, esposa del taquero acusado de desaparecer a la niña, Marco Antonio N, fuera trasladada a Chetumal, pues los dos estaban en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cancún, y tenían cita conyugal cada semana. Dijo que está en espera de desahogo un amparo que interpusieron para no ser sentenciados, pero sólo es un ardid para ganar tiempo, pues hay suficientes pruebas que condenan al taquero, por lo que confió que a finales de mayo sea sentenciado.
No obstante, sostuvo que lo que más desea es que su hija aparezca, y si después de ellos los jueces quisieran condenar o enjuiciar al taquero, a ella ya no le importaría, pues sólo está en espera de su hija.
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