
Los cañeros del ingenio de Atencingo, en el municipio de Chietla, acordaron con los gobiernos estatal y federal reunirse a partir del próximo lunes para establecer una comisión interinstitucional en la que puedan acercarse programas de reactivación del campo para la zona Mixteca.
Con esta medida provisional se pretende dar solución a la crisis por la que atraviesa este ingenio y que pone en riesgo a 20 mil familias de la región, que dependen del corte anual de caña para la producción de azúcar.
A este acuerdo llegaron los 5 mil productores cañeros de esa región, luego de que ayer por la mañana marcharon por las calles de la capital del estado de Puebla, y se manifestaron frente a Casa Aguayo para exigir una respuesta por parte del gobierno del estado.
Así, quedó desactivada por el momento la toma de carreteras y autopistas como medida de presión que ya preparaban los campesinos en contra de los gobiernos, en caso de no lograr acuerdo alguno. Los beneficios que de este acuerdo se desprendan también serán para los cañeros de la región de Calipan, en la Sierra Negra de Tehuacán.
En la minuta que se firmó este jueves por la tarde se estableció que tanto la Secretaría de Desarrollo Rural del gobierno del estado, como la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) y otras dependencias involucradas se reunirán con los representantes cañeros para determinar qué tipo de programas de reactivación del campo están vigentes a fin de poder canalizar recursos inmediatos.
Los representantes del gobierno del estado abrieron la posibilidad de solicitar una línea de crédito, aún no determinada en monto, para que los recursos que reciban los cañeros lleguen de forma inmediata. Este crédito se pagaría con el dinero que reciban los productores producto de los recursos federales que se enviarán el próximo año.
Los ingenios de Atencingo y Calipan perdieron este año más de 482 millones de pesos por la caída en los precios del azúcar. En la zafra 2012–2013, los cañeros recibieron un anticipo de 550 pesos por tonelada, pero el precio de liquidación al cierre de mayo fue de 509 pesos con 83 centavos, por lo que cada productor adeuda al ingenio 40.17 pesos por cada tonelada cosechada.
El líder cañero el ingenio de Atencingo de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Gabriel Conrado González Cortés, afirmó que el pago fijado en 509 pesos es 36 por ciento inferior al que se acordó en la zafra pasada, de 805 pesos.
Para González Cortés, el gobierno de Rafael Moreno Valle no puede eludir su responsabilidad de apoyar a este sector, pues esa cantidad de familias poblanas de la Mixteca y la Sierra Negra.
Recordó que mientras gobiernos estatales como los de Morelos y Veracruz están apoyando con subsidios a sus productores, la administración estatal se deslinda afirmando que la crisis del sector azucarero y de la producción cañera corresponde a la Federación.
El diputado local por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) David Espinosa, quien también se sumó a la marcha de campesinos afirmando que el también es productor y es el representante de la región sur del estado, afirmó que el estado de Puebla recibirá más de 10 mil millones de pesos como parte de la llamada “Cruzada contra el hambre”, que impulsa el gobierno federal, por lo que de ese monto se podrían tomar 250 millones de pesos para paliar la crisis cañera y evitar que miles de campesinos “padezcan hambre”.
Reconoció que la política de Rafael Moreno Valle para el sector agrario del estado no ha tenido resultados, pero eso no significa que la fracción del PRI llamará a comparecer al titular de Desarrollo Rural, Julio Lorenzini. “Vamos a privilegiar el diálogo”, acotó.