Si el presidente municipal de Puebla, Luis Banck Serrato, quiere demostrar un interés real para frenar el creciente, o mejor dicho desbordado problema de la inseguridad pública en la capital, tiene necesariamente que remover a Alejandro Óscar Santizo Méndez de la titularidad de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (SSPTM), ya que este funcionario no solamente ha sido incapaz de frenar la ola delictiva y los abusos policíacos, sino que pertenece al grupo de Facundo Rosas, de quien se sospecha que permitió el crecimiento del hampa en el estado.
La observación que ayer hizo al rector de la UPAEP, Emilio José Baños, en reacción al asesinato –en un asalto– de un alumno de esa institución, de que no se observa en el gobierno un interés decidido de frenar la violencia delictiva, es un percepción compartida por el grueso de la ciudadanía. Para el caso de la capital resulta grave, dramático, que entre 6 y 7 de cada 10 habitantes adultos –de acuerdo a sondeos oficiales– sienten miedo de vivir en la ciudad por el temor a los asaltos.
Frente a ese situación es necesario observar que si Luis Banck quiere seguir haciendo carrera política luego de dejar el cargo de edil sustituto de la ciudad, tiene que dar un mensaje real y fuerte de que su prioridad es la seguridad pública. Y para empezar debe analizar seriamente la permanencia de Alejandro Óscar Santizo, pues este personaje es uno de los principales responsables de que Puebla sea una ciudad peligrosa, donde se puede morir al subir a un microbús o al ir a comer a un restaurante.
Son dos los factores que tendrían que provocar a la voz de ya la salida de Santizo Méndez:
Primero: el factor más importante es que el titular de la SSPTM llegó al cargo por una imposición que hizo entre 2013 y 2014 el entonces secretario de Seguridad Pública del estado Facundo Rosas Rosas, en cuya gestión se dejó crecer con absoluta impunidad el robo de combustible en el estado, a tal grado que dos de sus hombres de confianza fueron detenidos en flagrancia por el Ejército dando protección a huachicoleros.
Facundo Rosas impuso a los secretarios de seguridad pública en casi dos terceras partes de los municipios del estado, en los meses posteriores a la elección de los actuales alcaldes. Casi todos eran ex funcionarios públicos despedidos de la Policía Federal. En la mayoría de los casos estos personajes dejaron crecer todo tipo de delitos.
De los pocos mandos que colocó Facundo Rosas que han sobrevivido en los puestos asignados, destaca la figura de Alejandro Óscar Santizo, quien entró al ayuntamiento de Puebla cuando Antonio Gali era edil y mucho se ha dicho que, el ahora gobernador del estado, nunca le tuvo suficiente confianza.
Por esa razón Santizo no llegó a ningún cargo en el Poder Ejecutivo estatal, pese a que el titular de la SSPTM a todos decía que si Gali ganaba la elección de 2016 él iba a ser el secretario de Seguridad Pública en la entidad.
Se dice que Facundo Rosas sigue siendo el principal protector de Alejandro Óscar Santizo.
Si eso resulta ser cierto, es para sentir miedo, ya que Facundo Rosas es parte del grupo del oscuro Genaro García Luna, quien encabezó la Secretaría de Seguridad Pública en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa y acostumbraba hacer montajes mediáticos para fabricar delitos de detenidos que eran inocentes.
Segundo: a lo largo de la gestión de Alejandro Santizo han surgido escándalos de policías dando pro
tección a huachicoleros, de protagonizar escándalos sexuales, de cometer abusos contra automovilistas y ciudadanos que caminan en la vía pública.
Y lo más importante: a lo largo de los meses en que Santizo Méndez ha estado al frente de la SSPTM se ha desbordado los robos a comercios; los asesinatos por asaltos en restaurantes, en supermercados, en cajeros automáticos y en la calle; los atracos en vehículos del transporte público, el hurto de autopartes, las balaceras en la vía pública y la venta de drogas.
Frente a estos datos surge una pregunta básica: ¿Qué esperan para correr a Santizo?
¿ O no será que no lo remueven para no hacer enojar a Facundo Rosas?