Luego de la visita de un grupo de legisladores federales al penal de San Miguel, las autoridades cedieron a las presiones y permitieron que el dirigente Rubén Sarabia Sánchez Simitrio, fundador de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes 28 de Octubre, cuente con la visita semanal de un médico internista que atienda la diabetes crónica que padece.
Familiares de Simitrio informaron que esto permitió que el dirigente presente una leve mejoría en su salud, tras aplicarle la hormona de insulina. Esto debido a que dentro del centro de reclusión se le negó la atención médica.
El lunes, el senador Luis Sánchez y los diputados Roxana Luna Porquillo, Carlos Gámiz y Josefina Salinas, acudieron personalmente al penal para hacer válidas las medidas cautelares emitidas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para protección de presos políticos.
Dicha visita fue a petición del Frente de Organizaciones Sociales y Políticas del Estado de Puebla (Fosyppue), que dio a conocer que Simitrio presentó en reclusión un cuadro de hiperglucemia, con un nivel de 380 por ciento de glucosa en sangre, provocándole mareos y debilitamiento.
Incluso la defensa legal indicó que interpondría un juicio de garantías para buscar el arraigo domiciliario del líder social, a pesar de que el próximo 15 de enero, el mismo día que el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas presentará su cuarto informe de gobierno, cumple su condena.
Tonatiuh Sarabia, hijo y abogado del dirigente social, precisó que el amparo ha sido promovido, pero es la fecha en que no hay una respuesta.
En ese sentido, denunció que existe un tortuguismo por parte de algunos funcionarios que están alargando los tiempos procesales a fin de evitar que su padre salga libre el 15 de enero.
Fue claro al señalar que dudan de que Simitrio recupere su libertad la próxima semana, como marca la sentencia, ya que no descartó que aprovechando su reclusión en el penal de San Miguel, las autoridades estatales le “fabriquen” delitos.
El declarante expuso que los distintos juzgados de la Secretaría de Ejecución de Sentencias, que depende de la Secretaría de General de Gobierno estatal, como el Juzgado Quinto de lo Penal y el de Ejecución de Medidas Cautelares, se han declarado incompetentes para resolver el expediente de Simitrio.
Lo anterior a pesar de que el Juzgado Quinto de lo Penal fue el que dictó la orden de reaprehensión contra el dirigente de la 28 de Octubre.
Estas prácticas dilatorias contra el resolutivo de los procesos penales también se están aplicando a Rubén Sarabia Reyna, quien también se encuentra recluido en San Miguel, detenido tres días después de la aprehensión de su padre.
Tonatiuh Sarabia acusó que existen excusas irrisorias que están retardando el proceso tanto de Simitrio como de Rubén, su hermano.
Entre ellas enumeró que está el pretexto de la falta de tiempo para fotocopiar documentos de parte del personal de los juzgados, mientras que la Secretaría de Acuerdos no aceptó el nombramiento de su abogado defensor, según las actuaciones entregadas.
Ante lo expuesto, el abogado explicó que estos actos representan una privación ilegal de la libertad de parte del estado hacia Simitrio.
Por tal razón, indicó que recurrirá a tribunales internacionales si es necesario, pero por lo pronto agota las instancias locales.
El pasado 19 de diciembre, afuera de las oficinas del secretario de Gobernación de Puebla, Guillermo Aréchiga Santamaría, fue detenido sin una orden judicial Rubén Sarabia Simitrio.
Por la tarde del mismo día, el líder social ingresó al centro penitenciario capitalino con un cuadro agudo de fiebre, molestias del riñón y plaquetas bajas que se suman a su padecimiento de diabetes crónico.
La orden de aprehensión fue liberada por el juez Quinto de lo Penal, a pesar de que Simitrio cuenta con un amparo de la justicia federal.
La defensa legal expuso que al líder comerciante se le detuvo bajo el pretexto de que violó el beneficio de preliberación del que gozaba desde el 4 de abril de 2001, el cual finalmente le fue revocado.
Tres días después, al término de una marcha en la Ciudad de México, fue aprehendido su hijo Rubén Sarabia Reyna, cuando exigía la liberación de su padre y de otros presos políticos del país.