El secretario de Gobernación del estado de Puebla (Segob), Javier Aquino Limón, reveló este martes que ya no se construirá una planta tratadora de aguas residuales en el municipio de Huejotzingo, luego del rechazo de pobladores de la comunidad de Santa Ana Xalmimilulco. Según el funcionario, la determinación de cancelar la obra la tomaron de manera directa el ayuntamiento, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y el gobierno del estado de Puebla para evitar un conflicto en la comunidad de Xalmimilulco.
Por otra parte, la alcalde de ese municipio, Angélica Alvarado Juárez, acusó que existe un trasfondo político para la cancelación de la obra y advirtió que podrían perderse 400 millones de pesos que deberían regresarse a la Federación, de una obra que por cierto cuenta con todos los permisos para realizarse.
La planta tratadora de agua y los colectores pluviales, que vienen desde las comunidades de Santa Rita Tlahuapan, San Martín Texmelucan y Huejotzingo, es una de las respuestas frente a los 11 puntos planteados por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en su recomendación número 10/2017, para ejecutar acciones con miras a avanzar en el saneamiento del río Atoyac, debido a los daños a la salud que ha provocado la contaminación a los habitantes de Puebla y Tlaxcala.
Desde el año pasado un grupo de pobladores de Xalmimilulco se manifestaron y realizaron varias protestas y hasta cierres carreteros, con detenciones de algunos lugareños, por oponerse a la obra, bajo el argumento de que sería la construcción de un fraccionamiento y no de una planta tratadora de aguas residuales.
Desde octubre de 2023, los vecinos denunciaron en la exhacienda de Santa Ana de Abajo, la construcción de un fraccionamiento denominado Los Volcanes Residencial, que el grupo inmobiliario Casas Ara Puebla pretende construir en la zona, agravando los problemas de escasez de agua, que ya padecen.
Hoy la narrativa frente al rechazo del residencial de Casas Ara parece confundirse con la posibilidad de la tan necesaria obra de saneamiento de aguas residuales que busca limpiar las aguas y contribuir a reducir la contaminación del Atoyac, considerado el segundo infierno ambiental de México. Sería más que lamentable que la planta tratadora en Santa Ana Xalmimilulco no se concretara y que el diálogo con los vecinos no pudiera aclarar las diferencias y resolver las inconformidades.