La subestación eléctrica que busca establecer la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en el municipio de Cuetzalan del Progreso nunca se va a concretar; así lo refrendaron alrededor de 5 mil personas procedentes de 173 pueblos, de cuatro estados del país y una representación de la tribu Sioux de Estados Unidos, que participaron en la edición número 18 de la Asamblea en Defensa del Territorio y por la Vida.
Con la multitudinaria convocatoria que se desarrolló este sábado en el atrio de la parroquia de San Francisco de Asis en Cuetzalan, van tres años de resistencia de las comunidades maseual, y por el paso del tiempo se han solidarizado, primero, los pueblos totonakú y mestizos de la Sierra Nororiental de Puebla y de Veracruz, y ahora lo hicieron comunidades mayas de la península de Yucatán y coras de Nayarit, además de la tribu sioux de la nación Standing Rock en Dakota, EU.
La resistencia suma, además, tres meses de un campamento que se instaló el 19 de noviembre pasado en la entrada al terreno en donde se pretende edificar la estructura de alta tensión, y no es un simple bloqueo, se ha convertido en un lugar de siembra de cultivos, de educación y de convivencia cultural el cual opera con paneles solares para demostrar así que se busca la soberanía energética en la región.
El pasado sábado en dicho campamento se dijo por primera vez que la subestación nunca se va a realizar. La declaración corrió por parte de la presidente del Comité de Ordenamiento Territorial Integral (Cotic), Rufina Edith Villa Hernández quien encabezó una marcha hacia el centro de Cuetzalan para luego dar inicio a la asamblea.
“Estamos aquí para decirles a las autoridades y a la empresa que no vamos a permitir que se construya aquí la subestación eléctrica, eso no es el progreso para nosotros, el progreso es una vida digna. Debemos demostrar con nuestra vida que es lo que queremos”, dijo la mujer indígena en lengua náhuatl y luego lo repitió en español para que el pueblo maseual y mestizo se animara a participar en la asamblea.
Después de las 9 de la mañana unas mil personas partieron desde el terreno de la subestación y agradecieron a los que se quedaron a cuidar el campamento edificado con palos de bambú.
Mientras caminaba en la parte trasera de la manifestación, Rufina Villa explicó que la exigencia única a lo largo de tres años y que se mantiene es la cancelación del proyecto de la CFE que busca tender una red que llegue al municipio de Ayotoxco de Guerreo.
“Nunca nos hablaron con la verdad, nunca nos dieron la información real de la Comisión Federal para que se haga el proyecto ni tampoco del municipio. Como ciudadanos tenemos derecho y también como COTIC, por parte de las comunidades sabemos que por todo el voltaje es demasiado para lo que Cuetzalan necesita como población”, explicó la dirigente.
También aseguró que la instalación de la subestación eléctrica busca alimentar proyectos de explotación de recursos naturales alrededor de Cuetzalan, así lo supieron porque en el documento de Manifiesto de Impacto Ambiental que presentó la CFE dice que Cuetzalan tiene vocación para turismo y minería “allí mismo ellos mismos lo están diciendo”, reprochó la mujer indígena.
A la par de la movilización que partió del campamento, salió una manifestación procedente de la junta auxiliar de San Miguel Tzinacapan. Cerca de las 10 de la mañana las dos concentraciones se unieron en el atrio de la iglesia en donde los esperaban otras personas para dar de desayunar a todos los asistentes.
Mientras se repartían tamales, molotes, tlayoyos, tacos y agua de jamaica los asistentes ocuparon su lugar. En total fueron 18 municipios de cuatro estados del país, muchos de éstos comparten la defensa de su territorio debido a que se pretenden instalar proyectos mineros, hidroeléctricos o de extracción de hidrocarburos en ellos.
Gobierno municipal mintió: entregó el cambio de uso de suelo
Al iniciar la asamblea se hizo un recuento de las nueve reuniones que realizó la CFE en la cabecera municipal y las ocho juntas auxiliares de Cuetzalan, supuestamente como parte del proceso para informar sobre el proyecto eléctrico.
Ante los miles de asistentes se reprobó que la paraestatal lo haya hecho en horarios poco accesibles y por separado, además en las reuniones se invitó al interlocutor de la CFE,
José Becerra, para que asistiera a la Asamblea de este sábado y expusiera el proyecto.
Con esta intención, se colocaron en el estrado dos asientos, uno para Becerra y otro para el presidente municipal, óscar Paula Cruz, para que ambos dieran la cara ante el pueblo. Se les dio un aplauso para que se animaran a asistir, pero sus lugares se quedaron vacíos.
Luego de evidenciar la ausencia, Leonardo Durán, integrante del COTIC y del Consejo Tiyat Tlatli, informó que pobladores de Cuetzalan presentaron en diciembre pasado un recurso de inconformidad contra su ayuntamiento porque mintió al decir que había negado el permiso para el cambio de uso de suelo, aunque en realidad sí lo había hecho, pero hasta la fecha ni el alcalde ni el síndico municipal se han manifestado al respecto, dijo el ingeniero.
“Lamentamos que tengan tan poco valor civil como par hacer frente a sus compromisos. Pero en este pueblo no actuamos de forma ilegal, pues en la Constitución dice que la máxima autoridad son los pueblos, por eso hemos decidido parar esa obra. No haremos más que con la paz, con cultivar y construir y de la misma manera les queremos decir que el proyecto nunca va a pasar”, señaló Duran.
Precisó que buscan construir, como se hizo en el campamento que en 15 días se erigió y ahora tiene una milpa y, desde hace un mes, paneles solares para brindar servicio a los que permanecen allí.
Para profundizar en la soberanía energética, el periodista Pedro Miguel informó que él participó en la colocación de los paneles que hasta la fecha no han fallado, a pesar de ser Cuetzalan uno de los municipios más nublados del país.
En ese sentido, Aldegundo González presentó tres propuestas de acuerdo a la Asamblea: la primera fue refrendar las acciones de bloqueo a la subestación y que todos los pueblos donde corre la línea de alta tensión estén pendientes de que no se construya nada; como segundo punto se refrendó el respaldó a las otras luchas que se han solidarizado con Cuetzalan; y como tercero, se creó el compromiso de trabajará en generar tecnologías alternativas para reducir energías y tener energías limpias para estar siempre conectados por la vida.
Las propuestas fueron avaladas por unanimidad de los asistentes y para mantener firme la defensa del territorio de la Sierra Norte se acordó que la próxima asamblea se realizará en Jonotla para el 23 de abril y la número 20 en Xochitlan.
El acto terminó con la participación de dos mujeres de la tribu Sioux de Standing Rock, Cheryl Angel y su intérprete y también indígena de la tribu Cheyenne, Lyla June Johnston, manifestaron el honor de estar en tierra maseual e hicieron suya la lucha por la defensa de la tierra.
“Vengo de tierras del Norte, para decirles que estoy con ustedes, comprendo que tú lucha es mi lucha, rezaré para que nuestras familias este unidas con la unidad y la oración ganaremos”, dijeron las nativas estadounidenses que con el apoyo de activistas mantienen desde abril del año pasado un bloqueo para evitar que pase un oleoducto por sus territorio.