Debido a la insuficiencia de médicos especialistas, el tiempo de espera para que los derechohabientes del Hospital Universitario de Puebla (HUP) obtengan consulta con uno de ellos es de hasta ocho meses, señalaron integrantes del Movimiento de Jubilados Unidos de la UAP.
En conferencia de prensa indicaron que con frecuencia los galenos dejan de laborar en el referido nosocomio, debido a que los salarios que perciben son bajos y pasan periodos largos antes de que contraten a otros más.
También indicaron que, al acudir a surtir su receta en las Farmacias Universitarias, a los derechohabientes les dicen que no están disponibles las medicinas, pero cuando un cliente pregunta por las mismas sí se las venden.
De igual forma, refirieron que algunos servicios subrogados no han estado disponibles porque no se han lanzado las licitaciones y solo hay convenios parciales temporales.
Uno de ellos, explicó José Antonio Pérez Moreno, integrante de la coordinación del Movimiento de Jubilados, es el del servicio de óptica, el cual estuvo detenido por un mes.
Asimismo, exigieron que la universidad pague rápidamente a los trabajadores los estudios que se realizan en instituciones particulares, los cuales llegan a ser de hasta miles de pesos; o que garantice la disponibilidad de aparatos para realizarlos en el Hospital Universitario.
“Llega el momento en que el trabajador no tiene dinero, hay estudios que son de hasta 5 mil pesos. Hay un compañero que se la autorizó un estudio el mes de julio y hasta el momento no se lo ha hecho porque no tiene dinero una polisomnografía, tiene un costo de 5 mil pesos”.
En ese sentido, demandaron que se adquieran más tomógrafos, mastógrafos y equipo para la realización de ultrasonidos.
Enrique Hernández, quien también forma parte del Movimiento de Jubilados, sentenció que si por falta de atención médica alguno de sus compañeros muere, las autoridades del hospital y universitarias serán las responsables.
“Vemos que hay una negligencia o una violación a esos contratos o derecho a la seguridad social. Si alguno de nuestros compañeros, por negligencia médica, por negligencia de organización, muere, hacemos culpable a la administración central y a las personas que sean necesarias acusar”.
Los declarantes indicaron que, en caso de no obtener una respuesta a sus peticiones, en las próximas semanas podrían realizar plantones y mítines.
En ese tenor, solicitaron a las autoridades universitarias retomar en breve las reuniones y mesas de trabajo, pues la última se realizó en marzo pasado.
Además piden que en las mismas estén los directores del Hospital Universitario y de la Facultad de Estomatología, para que expliquen la falta de atención médica y planteen soluciones.
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