Aunque dijo haber sido un “invitado mudo” a la visita que el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador realizó a la industria militar el viernes pasado, el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta reveló que se constituirá un fideicomiso con 150 a 200 millones de pesos de fondos estatales para la construcción de cuatro planteles en lo que fue La Célula: un Centro de Desarrollo Infantil (Cendi) preescolar, una primaria y una secundaria.
“El presidente se fue muy satisfecho de los trabajos que ahí se están desarrollando, de su avance y, desde luego, nosotros aportamos lo que nos corresponde, el gobierno se comprometió a hacer una escuela, que es de Cendi, primaria y secundaria, y creemos que para que haya la prontitud necesaria, y que la construyan los propios ingenieros militares con las técnicas de construcción que están utilizando de enorme rapidez”, dijo ayer el mandatario en una entrevista ayer.
El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, y el gobernador Miguel Barbosa Huerta, supervisaron la construcción de las instalaciones de la Industria Militar que se está estableciendo en el predio denominado “La Célula”, en donde hasta el momento se han construido siete fábricas de armamento.
Acompañado por el General Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional, el titular del Ejecutivo Federal recorrió esta obra que edifica la Sedena en una extensión de 600 hectáreas, desde la que se surtirán armas al Ejército, la Fuerza Aérea Mexicana, dependencias de seguridad, en algunos casos a la Marina y, posiblemente, a la Guardia Nacional.
La construcción inició en septiembre de 2017, lleva cuatro fases y este año requirió de una inversión de 10 mil millones de pesos.
En este lugar se reubicará la Industria Militar, que actualmente se encuentra en la Ciudad de México, esto con el fin de transformar y modernizar las fábricas que conforman este complejo.
En 2017 se construyeron las siguientes obras correspondientes a la primera etapa: nave de ensamble militar, almacenes generales, edificio de seguridad física, alojamientos de nivel sección y casetas de vigilancia elevadas.
La segunda etapa, que inició en 2018, consideró la fábrica de plásticos y de pinturas; asimismo, se trasladaron diversas células de servicios de apoyo para cubrir las necesidades de alimentación, alojamiento y atención médica del personal.
Este año se están detonando la tercera y cuarta etapa de la Industria Militar. La primera de ellas consideró la Planta de Tratamientos Térmicos y las fábricas centrales de herramientas y de matrices, las cuales están fusionadas en un solo organismo denominado Fábrica Central de Herramientas.
Mientras que la cuarta etapa, que lleva un avance de 87 por ciento y que concluirá el 31 de diciembre de este año, incluye una la Ensambladora Militar–Centro de Mantenimiento Blindado.
El proyecto ejecutivo, el cual es parte de la quinta etapa, se encuentra en proceso de integración.