Las cosechas, el maíz y el encuentro entretejen a los pueblos de Chignautla y Atempan como parte del In Tanamikilis, el encuentro de dos pueblos que será para el próximo 20 de septiembre a partir de las 9 de la mañana, en el cruce de Coahuixco.
El acto se enmarca en el mes de festejos que celebra este municipio ubicado en la sierra nororiental de Puebla que se da en agradecimiento a la “madre tierra” por la buena cosecha y echa mano de las 11 danzas originarias del pueblo, entre ellas la danza de los Paxtles, en las que se baila además al maíz confiados en que son los masehualme, los hombres y las mujeres del maíz.
Durante una conferencia de prensa, la síndico municipal Andrea Santos Ángel y Karina Reyes, directora de Cultura y Turismo señalaron que Chignautla es el municipio de los nueve manantiales y del cerro Ehecatl donde está el Cristo de la montaña, venerado desde los ancestros.
También, es el pueblo de las danzas autóctonas como los Tocotines, los Voladores, los Quetzales, los Negritos Papeleros y los Paisanos o Pilatos, quienes son los encargados de resguardar dichas danzas, a las que se suman otras tradiciones arraigadas como los llamados chilposos de puerco y res con col, que tienen una sazón propia según cada 67 mayordomías, y que en conjunto han ido guiando el patrimonio intangible de esta región.
En el caso del In Tanamikilis, expuso la síndico Andrea Santos Ángel, es el encuentro ocurrido durante los festejos que inician el 7 de septiembre y cuya fiesta patronal dedicada a san Mateo “no existe sin el xole”, la bebida de purificación que se bebe antes de cada celebración hecha de maíz quemado amarillo-azul, cacao, canela y panela.
“Chignautla existe: tiene magia, tiene colorido, tiene música y es una fiesta casi todo el mes de septiembre”, confió la miembro del Cabildo.
En su caso, Karina Reyes, directora de Cultura y Turismo explicó que estas fiestas conllevan casi un año de trabajo iniciando con la búsqueda de quienes se encargarán de las “dancitas”, que serán vecinos que tengan experiencia y a quienes se les busca para ir a pedir el “favorcito”, una búsqueda que incluso implica al presidente municipal que lleva una canasta adornada para pedir el favor. Así, una vez que los “encargaditos” aceptan, tienen que ir a buscar a los grupos de danzas, yendo casa por casa, con regalos. Luego, en el primer domingo de julio se empezarán los ensayos en casas de los “encargaditos”.
La funcionaria municipal mencionó que no faltarán los llamados Pilatos, hombres vestidos totalmente de negro que llevan un amplio sombrero de ala, un pañuelo que cubre medio rostro y sus ojos con un velo que apenas deja ver su mirada, que salen por las calles principales de Chignautla tocando con un pequeño tambor una tonada repetitiva, con la que “purifican” el ambiente y llaman a la buena cosecha.
Estos hombres -acota- van cuidando de las danzas que se ejecutan en torno a las fiestas que año con año realiza este municipio serrano desde el 7 y 8 de septiembre, y continúan hasta el 21 del mes en que conmemoran al patrono de la comunidad pasando por el día 20, el día del encuentro de danza In Tanamikilis.
Por tanto, apunta Reyes, en el In Tanamikilis, vocablo nahua que significa “el encuentro”, Chignautla se hermana con Atempan: primero con sus autoridades civiles que son adornadas con collares de flores, de pan y hojas de naranjo, luego las religiosas y luego las culturales y sociales, que son acompañadas por 10 danzas locales, quienes se entrecruzan en la localidad de Coahuixco.
“De esta manera, los pueblos refrendan su hermandad, los compromisos, la solidaridad y el respeto, además de que se da el agradecimiento por la cosecha y se baila el Xochipitzahuac”, detalló.
Completó que, tras el ritual de hermanamiento, los pueblos inician una caminata de 2.5 kilómetros hasta llegar a Chignautla, en un periplo de danza y música tradicional, que tiene en el centro a san Mateo Apóstol y como invitado a san Francisco de Asís.
“Por eso es un día tan mágico, tan especial que hasta se respira esa algarabía, esa ceremonia con la que la gente va para ese encuentro”, afirmó Karina Reyes.