La falta de agua por más de 10 meses en la junta auxiliar de San Miguel Canoa ya generó graves problemas de salud debido a que en este periodo hubo un brote de hepatitis en la comunidad indígena ubicada al norte de la ciudad de Puebla, reveló Primitivo Arce Luna, presidente del Comité de Agua Potable.
En entrevista con La Jornada de Oriente, el representante de este órgano ciudadano reveló que ante la falta de agua, la población consume la que está disponible en un jagüey, al norte del municipio, la cual podría estar contaminada.
Manifestó los casos se generaron en el mes de marzo en una escuela primaria que se encuentra en la comunidad, misma que afectó a al menos 100 niños.
Aunque fue atendida con prontitud representa un grave problema de salud propiciado con la falta de higiene por no tener acceso a agua potable.
Indicó que se trata de una situación que genera desesperación entre los pobladores, quienes tienen que contratar pipas de hasta 500 pesos o consumen el agua que está disponible en un jagüey, ubicado al norte de la población, el cual contiene agua que podría estar contaminada.
Población suma más de 10 meses sin agua
La junta auxiliar de San Miguel Canoa, ubicada al norte de Puebla capital y una de las más marginadas del municipio, suma este diciembre más de 10 meses sin el servicio de agua potable por el adeudo millonario del comité ciudadano del agua potable con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) lo que afecta a 30 mil habitantes de la comunidad indígena.
Hasta el momento no se ha logrado un acuerdo entre el Comité de Agua y la autoridad auxiliar con la paraestatal para hacer un plan de pago y poner a operar los pozos.
Al respecto Arce Luna afirmó que se había acordado con la CFE que depositaran 300 mil pesos para la reconexión del suministro, con lo cual se volverían a operar los pozos; sin embargo, hasta el momento no se ha reestablecido la energía.
En un recorrido por la población se observó que los habitantes tienen que comprar pipas con costo de más de 500 pesos para abastecerse del líquido y cubrir sus necesidades básicas.
El problema se agrava en las comunidades más alejadas de la propia junta auxiliar donde no llega la cobertura del líquido, incluso aunque los pozos estén operando, por lo que toman el agua de jagüeyes, aunque pudiera estar contaminada.
Idea ayuntamiento captadores pluviales
Matías Rivero Marines, secretario de Bienestar del ayuntamiento capitalino, afirmó que la autoridad municipal no puede asumir el costo de la deuda, debido a que incurriría en una irregularidad administrativa.
Cabe recordar que durante la pasada administración municipal el cabildo aprobó cubrir los adeudos con CFE que tenían los comités de varias juntas auxiliares sin que se consumara la llegada del dinero.
El funcionario municipal afirmó que el ayuntamiento está consciente que la carencia de agua potable afecta los derechos humanos de las personas, por lo que en las atribuciones que le corresponden a la comuna será intermediario con CFE para lograr un convenio de cobertura del adeudo.
Asimismo, afirmó que en octubre pasado se echó a andar un programa de captadores pluviales en las viviendas para usar esa agua en el aseo personal, lavado de ropa y de trastes e incluso con un filtro adecuado el líquido se podría usar para beber.
“El tema para nosotros es una encrucijada porque es una de nuestras 17 juntas auxiliares. El tema de no tener agua no solo es técnico sino de acceso a derechos humanos fundamentales. Estamos haciendo un plan con el presidente municipal para ver cómo podemos coadyuvar con CFE. No podemos ser ajenos a esos problemas”.
Reconoció que entre la población ya hay desesperación por la falta de agua por culpa de los malos manejos que hicieron los anteriores comités de agua potable.
En septiembre pasado, el propio edil auxiliar, Ruperto Pérez Lima, subrayó que ya se conformó un nuevo comité del agua con gente de la comunidad para tratar de resolver este conflicto con apoyo del ayuntamiento de Puebla capital.
Indicó que el ayuntamiento actual apoyará a la población para equipar dos pozos que no han sido terminados, en tanto que la población se organiza para cubrir el pasivo con la paraestatal para reestablecer el servicio.
La situación en la junta auxiliar se agrava porque tanto en esta como en Azumiatla se concentra la mayor parte de las casi 90 mil personas que viven en pobreza extrema en el municipios según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), lo que implica que amanecen sin peso para alimentarse.
Asimismo, la demarcación indígena se ha convertido en una de las más inseguras de la capital del estado, donde son comunes los robos a casa habitación, de vehículos, homicidios, además de que a decir de los habitantes se ha incrementado considerablemente el consumo de estupefacientes en el centro de la población.
Hay 173 mil poblanos sin acceso a agua
Por separado, Ernesto Antonio Aguilar Cabrera, regidor por Morena de la Comuna capitalina, informó que según el más reciente reporte anual sobre pobreza en el municipio de Puebla capital hay un total de 173 mil 900 poblanos sin acceso al agua, además de 27 mil 900 personas que no tienen drenaje.
Sostuvo que en esta situación de la falta de agua hay que incluir a los 30 mil habitantes de San Miguel Canoa, junta auxiliar que además registra carencias alimentarias, de viviendas y de acceso a la electricidad.
Coincidió que la carencia de agua en San Miguel Canoa es ya desesperante y de difícil solución, debido a que el comité de agua tiene libertad de funcionamiento e incurrió en malos manejos presupuestales.
En septiembre de este año, La Jornada de Oriente publicó que en los últimos cuatro años, los comités de agua potable de siete de las 17 juntas auxiliares en el municipio de Puebla sumaron adeudos con Comisión Federal de Electricidad por un monto de 18.72 millones de pesos por la morosidad de usuarios, actos de corrupción consistentes el robo de dinero recaudado, por la existencia de dos o más comités en cada demarcación y por la permisividad del ayuntamiento capitalino.
Según se desprende de la investigación realizada por este medio de comunicación en las 17 juntas auxiliares de la capital del estado existe un problema de desabasto y ausencia de acceso al líquido que afecta a 1.09 millones de habitantes en mayor o menor medida, cantidad que representa 64 por ciento de la población total de la capital del estado, según datos del Instituto Nacional de Estadística (Inegi).
Según reportes del ayuntamiento capitalino generados durante la presente y la pasada administración, de 2018 a la fecha los comités de agua en San Miguel Canoa, San Pablo Xochimehuacan, La Resurrección, San Francisco Totimehuacan (en la inspectoría de Guadalupe Hidalgo), San Sebastián de Aparicio y Santa María Xonacatepec han registrado adeudos con CFE por un monto de 18.72 millones de pesos.
Hay que decir que dichos comités están conformados por pobladores de las propias juntas auxiliares, los cuales son electos mediante asambleas y ofrecen el servicio de agua potable, a través del pago de cuotas que van de los 50 a los 100 pesos mensuales.
Ejemplos de adeudos de comités del agua con CFE generados por presuntos actos de corrupción son Canoa y San Pablo Xochimehuacan.