Naibi Lizbeth Cerón, quien se desempeñaba como agente de seguridad pública en el municipio de Tepeyahualco de Cuauhtémoc, fue despedida, agredida verbalmente y golpeada tras denunciar por violación sexual al director de la Policía de ese lugar, Jaime Rosales Zárate.
La afectada señaló que la Fiscalía General del Estado (FGE) no ha atendido su caso por lo que urgió la intervención del gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, pues indicó que además teme represalias tanto para su familia como para excompañeros de trabajo que la ayudaron a defenderse de su superior.
“Pedirles a estas personas, al fiscal, al secretario, que me apoyen y le den seguridad a mis compañeros porque estoy segura que pueden tomar represalias contra ellos ya que yo estoy alzando la voz, ellos son los únicos que me ayudaron pero ellos están amenazados”, denunció durante una conferencia de prensa que ofreció este miércoles en un café del zócalo capitalino.
Cerón narró que hace unos días fue víctima de una violación sexual por parte de Rosales Zárate por lo que lo denunció ante un agente del Ministerio Público (MP) después de analizar mucho el tema pues recibió amenazas de muerte si recurría a las autoridades por parte de su superior, quien incluso le dijo que su caso no procedería.
Una vez que interpuso la denuncia, esta le fue comunicada inmediatamente al director, por lo que teme que tenga un contacto con el agente del MP tal y como se lo advirtió.
Puedes ver:Tres hombres acaban con la vida de un joven en San Juan Tianguismanalco
Una vez que se conoció la denuncia penal, el director pidió a Naibi Lizbeth Cerón a su oficina, en donde le dijo que por instrucciones de la presidenta municipal Mónica Yolanda Martínez y del regidor de Gobernación Eduardo Torres, estaba despedida.
Una vez en el interior del inmueble, el directivo golpeó a la mujer y la agredió verbalmente, por lo que sus compañeros decidieron ingresar al lugar para evitar que la siguiera agrediendo, a lo que él pidió que se retirarán y que cerraran la puerta, según expuso.
Sin embargo, sus compañeros hicieron caso omiso y no se salieron hasta que ella también estaba afuera, por lo que también fueron amenazados por el directivo con que perderían sus empleos.
En ese sentido, pidió la intervención del gobernador pues indicó que la presidenta municipal y el regidor de Gobernación han hecho caso omiso de la situación y tampoco ha habido avances en la denuncia que presentó ante la FGE.
La afectada reiteró que teme por la integridad de ella, de su familia, así como por la estabilidad laboral de sus compañeros pues insistió en que estos recibieron amenazas sobre su permanencia en sus cargos de trabajo.