Para el sacerdote Alejandro Solalinde Guerra, coordinador del Albergue Migrante “Hermanos en el Camino” y defensor de los derechos de los migrantes, es la sociedad civil y no las autoridades quienes buscan a los desaparecidos en este país.
El padre Solalinde –como mejor se le conoce- estuvo la tarde de este miércoles en la ciudad de Puebla para participar en la conferencia “Diálogo por los Migrantes Desaparecidos”, en las instalaciones del Centro Internacional de Prospectiva y Altos Estudios (Cipae).
Al encuentro también asistieron candidatos de Morena y el exdirigente estatal Mario Bracamonte.
Formado en la Teología de la Liberación, el religioso dijo que “si hay algo peor que la muerte es la desaparición de personas, lo cual demuestra el tipo de sociedad en la vivimos”.
Reconoció que en ocasiones no se cuentan con los recursos suficientes para buscar a las víctimas, por lo que muchas veces son los propios familiares quienes emprenden esta ardua labor, con el apoyo de organizaciones civiles, a quienes se les atribuye el hallazgo de la mayoría de las fosas clandestinas en México.
En el contexto de la emergencia sanitaria, señaló que la búsqueda ha detenido a muchas familias, “pero esta pandemia viene justo cuando comenzábamos un cambio en este país, no importa si se llama Cuarta Transformación”.
A pesar de su simpatía con Morena y tras rechazar la presidencia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), a invitación del presidente Andrés Manuel López Obrador, Solalinde afirmó que no tiene más partido que el ser humano.
El sacerdote afirmó que es poco el trabajo que se ha hecho por las personas desparecidas, sin embargo, comparó que es “casi nulo” si se habla de la búsqueda de migrantes que no han sido localizados en territorio mexicano, el cual atraviesan como indocumentados para llegar hacia los Estados Unidos de Norteamérica.
De paso, pidió a los diputados locales de Puebla, especialmente a los que están en campaña para su reelección, que escuchen a los familiares de las víctimas de desaparición.
“Deben estar a favor de los ciudadanos, de la gente, que analicen la información que las familias les están dando”, exhortó, en relación a la propuesta que presentó el colectivo para la armonización legislativa en materia de Derechos Humanos.
El clérigo llamó al Congreso del estado para que en el tema de los desaparecidos tengan el reto de educar y formar conciencias.
“No puede haber peor agresión para un ser humano que la desaparición, entonces queremos evitar eso, tenemos que pensar en tender la mano, educar de corazón y concientizar”, recomendó.
No volvería a votar por Biestro, Merino ni Tonantzin
En su oportunidad, María Luisa Núñez Baroja, fundadora del colectivo “La Voz de los Desaparecidos” en Puebla, dijo que de enero a la fecha en el estado se han reportado al menos 2 mil 725 personas no localizadas.
A Solalinde expuso la desaparición de su hijo Juan de Dios, ocurrido desde el 28 de abril de 2017 en Palmar de Bravo.
Aprovechó para denunciar que los diputados locales se han rehusado a aprobar la Ley elaborada por las familias de desaparecidos en la entidad.
María Luisa adelantó que en esta semana entregará una carta al gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, en donde se le pide que se valore la iniciativa elaborada por el colectivo y que presentó a la bancada de Morena hace más de 10 meses.
Lo anterior, afirmó, porque los diputados siguen renuentes a dar el visto bueno a su proyecto, a pesar que fue desarrollado desde la experiencia y las necesidades de los familiares de las víctimas.
Finalmente, la vocera reclamó el letargo en la aprobación de la norma y dijo que “no volvería a votar por un Biestro, una Nora Merino o una Tonantzin”, en alusión a los diputados de Morena que prometieron apoyar al colectivo.