El presidente estatal del PRI, Néstor Camarillo Medina, dejó entrever que el excandidato a gobernador del tricolor Enrique Doger Guerrero y el líder estatal de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) serían los primeros en ser expulsados del partido.
Aunque no los mencionó por su nombre, sí los aludió al señalar que son “los dos más evidentes”, sin descartar que el listado se engrose conforme se acerque la elección de 2024.
En entrevista, descartó que se sume a los expulsados el presidente municipal de Zacatlán, José Luis Márquez Martínez -quien fue acusado al interior de Morena de operar a favor de Claudia Sheinbaum Pardo, para que ganara en Puebla la encuesta nacional que la convirtió en candidata virtual a la presidencia del país.
“Pepe es un gran amigo, un gran alcalde. Siempre hemos platicado con él y siempre ha atendido el llamado del PRI”, argumentó.
Descartó que la expulsión de priistas reduzca la fuerza del tricolor, así como la información que difundió Morena en el sentido de que ese partido ha perdido a nivel nacional a 78 por ciento de sus militantes.
“Es falso (que se haya reducido el número de afiliados en las dimensiones señaladas por Morena) y, sí, Morena ya creció (en número de integrantes), pero de puro expriista corrido del PRI”, anotó.
Explicó que el Revolucionario Institucional considera un acto de traición cuando sus miembros se presentan a actos proselitistas de partidos antagónicos.
En el caso de Enrique Doger y Leobardo Soto, distintos medios de comunicación del estado han dejado registro de su presencia en actividades de los aspirantes a la gubernatura de Morena Ignacio Mier Velazco y Julio Huerta Gómez, respectivamente, así como de diversas declaraciones públicas que han emitido a favor de esos proyectos.