Mientras en Puebla 1.7 millones de personas, aproximadamente, padecen de pobreza alimentaria, a diario se desperdician 2 mil toneladas de alimentos en la entidad, lo que equivale a 60 mil en un mes, estimó José Miguel Rojas Vertiz Bermúdez, director de la Fundación Cáritas.
En entrevista con La Jornada de Oriente, el también activista subrayó que el problema del desperdicio y el hambre en el estado es más grave de lo que se piensa, el cual prevalece en la ciudad de Puebla y su zona conurbada, donde se registra la mayor necesidad de alimentos.
Rojas Vertiz Bermúdez sostuvo que la mayor parte de los alimentos que se desechan en Puebla provienen de la Central de Abasto, mercados, restaurantes y empresas de alimentos, con algunos de los cuales la Fundación Cáritas tiene convenios para rescatar entre 3 y 4 por ciento de los mismos y entregarlos a personas de escasos recursos a través de despensas o comida preparada en ocho comedores comunitarios.
Tal vez te interese: Mil 400 toneladas de productos rescata al mes el Banco de Alimentos; representa 2.3 por ciento de todo lo que se desperdicia
Resaltó que el Banco de Alimentos de la Fundación Cáritas es una iniciativa de la sociedad civil en la que participa la iglesia católica con la finalidad de que no se desperdicien alimentos y estos lleguen a quienes los requieran, el cual suma 27 años con esta labor en la entidad.
Enfatizó que al provenir de la sociedad civil, el Banco de Alimentos no tiene ningún objetivo político, aunque sí existe vinculación y apoyo por parte de los tres niveles de gobierno.
En Puebla 1.7 millones de personas padecen hambre
El director de Cáritas subrayó que según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y el Inegi, actualizados a 2020, Puebla tiene un porcentaje por encima de la media nacional de personas que padecen inseguridad alimentaria.
Se trata de 30.4 por ciento de la población -mientras que a nivel nacional es de 22.5 por ciento- que equivale a 1.7 millones de personas que tienen dificultades económicas para acceder a la canasta básica y en casos extremos no cuentan con recursos para alimentarse.
Indicó que 50 por ciento del más de un millón 700 mil personas en inseguridad alimentaria se concentran en 15 municipios, entre los que destacan Puebla capital, Tehuacán, San Pedro y San Andrés Cholula, Coronango, Acatlán y Teziutlán, entre otros.
Sostuvo que estos datos evidencian que la pobreza alimentaria es sobre todo urbana, razón por la cual el Banco de Alimentos concentra sus esfuerzos de llevar alimentos semanalmente a un promedio de 170 mil personas.
La entrega de los alimentos recuperados por la fundación se hace a través de una cuota de recuperación de 70 pesos por cada persona apoyada, aunque aclaró que entre 9 y 10 por ciento de quienes reciben las despensas pagan una menor cantidad e incluso hay a quienes se les entrega sin pedirles dinero a cambio.
60 mil toneladas de alimentos desperdiciadas
El activista destacó que según datos recabados por la Red de Bancos de Alimentos a nivel nacional, en el país se desperdician 50 mil toneladas de alimentos diarias.
En el estado de Puebla la proporción es de 2 mil toneladas de alimentos desechadas al día, lo que equivale a que en un mes el desperdicio alcanza las 60 mil toneladas.
“El desperdicio es un problema más grave de lo que pensamos y el hambre en la ciudad también. Contrario a la creencia, la pobreza alimentaria prevalece en zonas urbanas de nuestro país. Por eso Puebla tiene en la parte de los municipios de mayor concentración demográfica la mayor necesidad de alimentos”, enfatizó.
Agregó que de esa cantidad el Banco de Alimentos Cáritas rescata al mes entre 3 y 4 por ciento, equivalen a mil 400 toneladas.
Expuso que los principales puntos de rescate de alimentos se encuentran huertos, invernaderos, la Central de Abasto, restaurantes y tiendas de autoservicio como Walmart, Chedraui, Costco; Soriana, la Gran Bodega y Oxxo, entre otros.
280 puntos de entrega en 66 municipios de Puebla y 33 de Tlaxcala
Destacó que la fundación tiene una estrategia en tres aristas para combatir la inseguridad alimentaria: El alimento para hoy (comedores); del mañana (despensas) y para el futuro (cursos de nutrición y capacitación para el trabajo).
Indicó que las despensas forman parte del segundo de estos objetivos, las cuales se distribuyen en 280 puntos de entrega ubicados en 66 municipios de la entidad y 22 de Tlaxcala.
“Tenemos 160 mil personas atendidas en promedio. La atención es semanal. Eso da certeza de que las personas tienen acceso constante”.
Al respecto, destacó que el alcance del Banco de Alimentos es regional, ya que los límites geográficos no nos deben impedir llevar alimentos a lugares cercanos siempre y cuando la logística lo permita.
En su opinión una despensa aislada no genera un cambio más que temporal, por lo que el acceso a estos alimentos debe ser continuo.
Asimismo, el Banco de Alimentos de la Fundación Cáritas entrega a granel a orfanatos, asilos y comedores, en los cuales previamente se realiza un estudio sobre su grado de vulnerabilidad y de socionutrición.
Tal vez te interese: Bancos de alimentos y espacios de despensas solidarias
Respecto a la cuota de recuperación de 70 pesos que se cobra a las personas beneficiadas, José Miguel Rojas Vertiz sostuvo que es para garantizar la operación del Banco de Alimentos y para que haya la presencia de dos productos básicos que no pueden faltar en la dieta de los mexicanos: frijol y arroz.
Sin embargo, destacó que entre 9 y 10 por ciento de los 170 mil beneficiados pagan 15 pesos o nada como cuota de recuperación, debido a las condiciones de vulnerabilidad en la que se encuentran por su estado de salud o edad.
En la epidemia por Covid-19 hasta 180 mil personas buscaron apoyo
Subrayó que durante la epidemia de Covid-19 aumentó hasta 180 mil las personas que buscaron apoyo del Banco de Alimentos.
Sostuvo que hasta antes de 2020, se brindaba apoyo en promedio a entre 130 y 140 mil personas, sin embargo se sumaron otras 40 mil más, principalmente porque se quedaron sin empleo a consecuencia de la emergencia sanitaria.
“En ese momento vimos muy de cerca la necesidad de muchas personas. No pudimos entregar con la frecuencia semanal como se requería ante la demanda. Sin embargo, después de ese periodo el promedio de apoyo bajó a 170 mil semanales”, expuso.
Se rescatan más alimentos de huertos e invernaderos
El director de Cáritas enfatizó que de las mil 400 toneladas que al mes rescata la fundación a través del Banco de Alimentos, la mayor parte, es decir entre 500 y 600 proviene de huertos, invernaderos y empacadoras.
Sostuvo que ahí se recolectan alimentos que no cumplen con los estándares de mercado y no son aptos para la comercialización.
“En las empacadoras hay gran cantidad de desperdicio. No se diga si el producto es para exportación porque los estándares son más estrictos”, indicó.
El siguiente punto donde más alimentos se rescatan con un total de 200 son las cadenas de autoservicio como Walmart -en su formato de Bodega Aurrera y Sams-; Chedraui, Costco; Soriana -Mega, City Club-, la Gran Bodega y Oxxo en su centro de distribución.
Agregó que en la Central de Abasto se rescatan entre 30 o 40 toneladas mensuales de alimentos, sin embargo, en marzo se juntaron 50 toneladas, siendo una cantidad importante de recolección.
El resto se obtiene de los abarroteros, las grandes bodegas y las empresas productoras como San Marcos, La Morena, Sabormex, y de empresas que se encuentran fuera del territorio poblano como Nestlé, Danone, Alpura y Santa Clara.
En este grupo también se encuentran restaurantes como Kentucky Fried Chicken, Pollo Feliz y Tagers, entre otros.
Cáritas tiene ocho comedores comunitarios
En su estrategia “Alimento de Hoy”, Cáritas cuenta con ocho comedores con la intención de dar alimento caliente a personas en situación de calle, adultos mayores en abandono, con enfermedades terminales o personas que tengan alguna situación que les impidan una vida laboral “normal” para generar ingresos y así su alimento diario.
Los comedores se ubican en Casa de la Familia (Centro Histórico de Puebla); Parroquia del Santo Ángel Custodio (Barrio de Analco); Parroquia de Nuestra Señora del Rosario (Margarita); Parroquia de la Santa Cruz (El Alto); Parroquia de Nuestra Señora de San Juan de Los Lagos; Parroquia de Nuestra Señora de los Desamparados; Parroquia de San Francisco de Asís (Chietla), y el último se encuentra en las instalaciones del Banco de Alimentos, en Camino Antiguo a Tlaxcala, número 209; Parque Industrial Ocotlán, San francisco Ocotlán; Coronango, Puebla.
José Miguel Rojas Vertiz Bermúdez informó que tan solo en el primer trimestre de 2023 se han entregado 36 mil comidas en estos ochos comedores, fuertemente vinculados con Pastoral Social.
“Ellos dan los espacios físicos y la gente voluntaria para que el alimento se prepare. Nosotros le proporcionamos alimento. Los apoyamos con todos los procedimientos para buenas prácticas”, acotó.