Agresiones verbales y al menos dos intentos de ser atropellados con saldo de una persona lesionada sufrieron ciclistas e integrantes de colectivos que este martes protestaron en la Recta a Cholula por la muerte de un joven de 16 años arrollado por un conductor.
A la voz de “ni una bici blanca más”, a las 15 horas se congregaron los manifestantes en la esquina de la recta y Avenida Zavaleta, casi en el punto donde Agustín Medina Meneses fue atropellado el domingo pasado en el marco de la Vía Recreativa Metropolitana por un automovilista que más tarde ese día fue detenido.
Este martes los activistas decidieron cerrar la circulación en los dos sentidos de la Recta a Cholula y de inmediato varios automovilistas reaccionaron de manera violenta.
Uno de ellos, en presunto estado de ebriedad, conducía una camioneta negra, la cual lanzó contra los manifestantes que le impedían la circulación sobre una de las laterales de la vialidad con sentido al Centro Histórico de la ciudad de Puebla.
Molestos e indignados, los activistas se subieron al cofre y la batea del vehículo y le lanzaron piedras y otros objetos que rompieron los cristales.
Enfurecido el conductor arremetió por segunda ocasión contra los manifestantes, uno de los cuales resultó con una mano ensangrentada al momento en que con la fuerza del acelerón se golpeó con la carrocería del vehículo.
A la vista de los agentes de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de Puebla capital el conductor se dio a la fuga a toda velocidad, mientras varios ciclistas intentaron alcanzarlo, al tiempo que le gritaban “asesino”.
Algunos de los manifestantes reclamaron airadamente a los agentes a quienes acusaron de ser complacientes con los automovilistas que los agredían reiteradamente.
Más tarde el vehículo fue abandonado en la Calle Insurgentes, casi esquina con la Avenida Zavaleta a escasos metros de la manifestación.
A través de un operativo, la Policía estatal dio con el paradero del conductor quien se observaba en estado de ebriedad, y lo presentaron ante la FGE, hasta donde fue custodiado por los propios ciclistas.
Previamente, el conductor de una camioneta blanca le aventó su vehículo a un grupo de ciclistas mientras intentaba evadir a toda velocidad la manifestación, a pesar de que la vialidad estaba cerrada.
Aunque los activistas le pidieron que regresara para irse del lugar por una de las laterales, de manera prepotente se quedó parado en el lugar e incluso ironizó que “de haber querido ya los habría atropellado”.
Pesé a la agresión clara en contra de los peatones, personal de Tránsito municipal dejó ir al conductor sin infracción de por medio, argumentando que la jurisdicción es de la Secretaría de Seguridad Pública, instancia que prometió que mandaría una patrulla pero nunca llegó.
Asimismo, otros automovilistas hicieron expresiones de molestia ante la manifestación y expresaron insultos a los activistas.
Pese a los inconvenientes los ciclistas colgaron una bicicleta blanca en memoria de Agustín Medina en uno de los postes para que estuviera a la vista de todos.