Realmente la administración de Miguel Ángel Mancera fue muy parecida a la de Enrique Peña Nieto: dedicada a enriquecerse a como diera lugar. Lo que explica que ambos fueran tan cercanos y hasta en un momento dado se propaló por los cercanos al jefe capitalino, que podría ser candidato peñista a la presidencia de la República. No se olvide que Mancera jamás se afilió al PRD; incluso ahora continúa sin hacerlo, no obstante que es aparentemente el jefe de la inexistente fracción del llamado sol azteca.
Miguel Ángel depredó los haberes con los que contribuimos: elevó el precio del Metro para mejorarlo, y no lo hizo; desapareció más de mil 500 millones de pesos aportados por muchos a la reconstrucción de los que perdieron viviendas en el terremoto del 19 de septiembre de 2017; dejó en ruinas el tren ligero, los trolebuses y disminuyó al máximo el transporte gubernamental de autobuses, amén de restringir el agua a muchas colonias, más un largo etcétera.
Una docena de sus ex colaboradores andan en fuga, incluidos sus dos cercanos a los que les llamaba “hermanos”, Julio César y Luis Ernesto Serna. Todos con procesos abiertos. Uno de los pocos que está en prisión es su jefe de asesores, Marco Antonio Vázquez.
Recientemente a Mancera se le inhabilitó un año para impedirlo trabajar en el gobierno capitalino, una medida que no le causa problema porque es Senador, pero la sentencia del TEPJF señala que lanzó propaganda en las elecciones de 2018, poniendo en “riesgo la equidad de la contienda, vulnerando el principio de imparcialidad y neutralidad”. En síntesis, violó el artículo 134 de la Constitución. Lo que muestra lo evidente: Miguel Ángel intentó por todos los medios que no triunfará López Obrador. Aunque Mancera dice que únicamente cometió una falta administrativa (sic que no entiende).
Hace unos días, elementos de la FGR catearon la casa de Carlos Serrano y María Fernanda Serna, ya que son parte de los 12 inmuebles, cuatro no declarados por Luis Serna y su esposa, María de los Ángeles Simón, que adquirieron ilícitamente el sexenio pasado. El motivo de la orden era conseguir documentación para cuando detengan a Serna y se puedan sustentarse las pruebas.
Como lo hizo en su momento Carlos Ahumada, las formas de operar de los hermanos Serna (el otro es Julio César), fue poner a nombre de las esposas, las hijas o los yernos las propiedades que iban obteniendo de contado. Así, suponían podrían tener una dispersión de la lana malhabida. Pero el numerito es tan conocido que por eso se catean domicilios de los familiares y cercanos a los posibles imputados.
En estos trasiegos están metidos los que ahora son conocidos, notoriamente, como El Cártel Inmobiliario. Los cuales hacen cambios de uso del suelo y de propiedades con el fin de simular. Y en dichas operaciones, según una investigación, participaron los notarios 215, Uriel Oliva Sánchez; el 244, Celso Jesús Pola Castillo y un par más. Todos con propiedades y bienes muy cuantiosos. Incluso Uriel ya fue requerido por la UIF.
Ellos junto con Simón Neumann y Fausto Galván, responsables de las mal llamadas desarrolladoras Baita y Dekah, respectivamente, llevaron a cabo una serie de edificaciones que estaban fuera de las normas, despojaron de predios a ciudadanos e hicieron construcciones que después colapsaron.
Uriel Oliva hizo inversiones extranjeras en Nueva York, Luxemburgo, demás países donde se lava el dinero, e incluso hasta en Cuba.
En dicho grupo se encuentra también el notario 122, Arturo Talavera, quien estaba ligado desde hace muchos años a Luis Ernesto Serna Chávez.
El salario de Luis Ernesto en los seis años que estuvo en el entonces Distrito Federal llegó a un poco más de cinco millones de pesos. Actualmente tiene propiedades e inversiones por decenas de millones. Ni sacándose el Melate varias ocasiones podrían tener esa fortuna, aunque ya sabemos que un priista, Fidel Herrera, ganó el premio mayor de la Lotería Nacional en dos ocasiones. ¡Para Ripley!
¿Ante todo esto el PRD ahora a cargo de Jesús Zambrano no ha dicho nada? Después se asombran por su desprestigio.
Mancera, un pájaro de cuenta.
- En mi anterior colaboración dije que don Pepe Mujica fue del grupo Montoneros. El maestro Alejandro Gálvez me corrigió puntualizando que Mujica participó en los Tupamaros. Es correcto. Gracias.
@jamelendez44