El gobierno capitalino no tiene facultades para revisar o determinar si es legal la procedencia de los productos que se venden en los tianguis de la ciudad, como los teléfonos celulares, reconoció el gerente del ayuntamiento, Adán Domínguez Sánchez.
Sin embargo, el funcionario aseguró que la Secretaría de Gobernación realiza operativos de supervisión en los mercados en cuestión, aunque de forma limitada, pues no cuenta con personal y recursos suficientes.
Domínguez fue interrogado sobre el tema durante una entrevista que otorgó este miércoles, a propósito de la serie de artículos que se comercializan en el tianguis de San Miguel, como teléfonos celulares que se exhiben sobre mantas que se colocan en el piso y por los que no se ofrece ninguna garantía a quienes los compran.
Tal circunstancia se repite en otros centros de comercio informales de la ciudad, ubicados en San Ramón, Xonaca e incluso en el Centro Histórico.
Al respecto, el gerente de la ciudad indicó que la comuna no cuenta con facultades para determinar la procedencia legal o ilegal de los productos que se comercializan en esos sitios, sino que ello corresponde a otras autoridades, por lo que incluso exhortó a los ciudadanos que sufran algún robo, como de sus celulares, a presentar la denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) para que ese delito se combata de dicha manera.
“La Secretaría de Gobernación realiza los respectivos recorridos en cada uno de los TIANGUIS. La Secretaría de Gobernación tiene personal operativo limitado y recursos limitados, en ese sentido, el ayuntamiento de Puebla lo que realiza a través de esta área son las supervisiones en toda la ciudad, en todos los tianguis de la ciudad, donde se va verificando que no se lleve a cabo la venta de productos que no tengan la legalidad para llevarse a cabo dentro de estos tianguis”, respondió.
Detalló que el personal de vía pública de la Secretaría de Gobernación cumple con realizar supervisiones en las que se pide a los comerciantes de los tianguis que cumplan con la norma, asimismo, se cumple con reportar a las autoridades competentes alguna anormalidad, para que, con sus facultades, procedan a hacer las revisiones correspondientes.
“Hay que decirlo, que en el caso de los productos que se venden no es facultad del ayuntamiento señalar si son o no de procedencia ilícita es muy importante que los ciudadanos, ante la Fiscalía interpongan sus denuncias si sufrieron algún robo”, agregó.
Es necesario recordar que en 2019, el ayuntamiento realizó modificaciones al Código Reglamentario Municipal para prohibir la venta de teléfonos celulares en vía pública, ya sea nuevos o usados, con el fin de inhibir la comercialización ilegal de sus artículos.
El entonces secretario de Gobernación en ese año, René Sánchez Galindo, afirmó que se realizaban operativos para decomisar esos artículos, principalmente en las calles 5 de Mayo y 8 Poniente.
Sin embargo, en septiembre del año pasado, el alcalde Eduardo Rivera Pérez reconoció que la venta de esos equipos se mantenía en calles del Centro Histórico, por lo que se realizaban operativos para prohibir dicha actividad.
“¿Que los ciudadanos nos ayuden a evitar estar comprando “más barato” teléfonos, llantas, rines, espejos, aparatos electrodomésticos, porque decirlo y hay que expresarlo así, de manera muy clara, si lo encuentras más barato en algún negocio de este tipo, en algún tianguis, algún mercado, aún en el propio centro, seguramente es un producto pues robado, es un producto que no tiene una procedencia legal, lícita, entonces hagamos también el esfuerzo y hago esa invitación a los ciudadanos de evitar comprar este tipo de productos en la calle”, mencionó en aquella ocasión.