Decenas de ejidatarios de Santa Rita Tlahuapan cerraron por más de siete horas el paso en los dos sentidos de la autopista México-Puebla a la altura del kilómetro 70+400 para exigir el pago de sus tierras ocupadas para la construcción de la misma vía.
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El bloqueo inició alrededor del mediodía y continuaba pasadas las 20 horas, lo que derivó en cientos de automovilistas varados, viajes de autobús cancelados y en la desesperación de los usuarios que condenaron que la vialidad sea usada constantemente como medida de presión hacia las autoridades.
Hacia las 6 de la tarde, los ejidatarios decidieron bloquear también la salida hacia el Arco Norte y el municipio de Calpulalpan, Tlaxcala, situación que ahorcó la circulación en la zona pues se redujeron las vías alternas para los conductores.
Alrededor del mediodía los inconformes se apostaron sobre la autopista, a la altura del kilómetro 70+400 e incluso colocaron carpas para evitar el paso de los vehículos hasta que no tengan una respuesta por parte de las autoridades sobre su exigencia sobre las indemnizaciones de sus predios.
Los manifestantes advirtieron que cerrarían el paso sobre la vialidad el tiempo que sea necesario, por lo que anunciaron que probablemente permanecerían hasta el miércoles, ya que aseguraron que solo han recibido promesas por parte de la Secretaría de Gobernación federal a cuyos funcionarios exigieron veracidad en los compromisos que hacían con ellos.
De manera particular señalaron los nombres de Tonatiuh Ramírez y Andrés Galan, quienes han dialogado con ellos a nombre de la dependencia federal, y de quienes exigieron su renuncia.
Cientos de conductores se quedaron varados sin poder moverse hacia otro punto, por lo que externaron sus quejas a través de redes sociales y exigieron que las autoridades liberaran la vialidad pues no tenían manera de llegar a sus destinos.
Medios de comunicación captaron cómo los usuarios de autobuses que tenían como destino la capital del país o Puebla, bajaron de las unidades para despejarse y tratar de tener movilidad, incluso, decidieron esperar en las laderas de la autopista en donde se sentaron debajo de árboles.
El conflicto también se vio reflejado en las terminales de autobuses Capu y TAPO, de Puebla y de la Ciudad de México, respectivamente, pues las empresas de transporte retrasaron y en algunos casos cancelaron sus viajes, por lo que pudo verse a usuarios esperando en dichos sitios.
Autoridades como el ayuntamiento de Texmelucan y Caminos y Puentes Federales (Capufe) difundieron mediante redes sociales vías alternas para los conductores.
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