Los pueblos de la región de los volcanes que mantienen bloqueado el acceso al relleno sanitario intermunicipal de San Pedro Cholula desde el pasado jueves 28 de marzo, acusaron que los ediles de Juan C. Bonilla y San Salvador El Verde están aprovechando el impedimento para hacer negocio, pues con ese pretexto han rentado camiones supuestamente para llevar los desechos a otros tiraderos –en lotes también arrendados– a pesar de que tienen vehículos propios para esa tarea.
Añadieron que el munícipe de Tlalancaleca ha dado la orden de aventar los desechos a una barranca en la comunidad de Tláloc y luego quemarla, lo que ha generado contaminación no solo de la tierra y el agua sino también del aire.
El sábado pasado se realizó el Encuentro de Pueblos contra el Basurero y, derivado de ese acto, ayer se dieron a conocer las conclusiones de los participantes, que se enlistan a continuación:
“1. Que el gobierno del estado, en voz del secretario de Gobernación Javier Aquino Limón, está más preocupado por criminalizar la lucha de la defensa del medio ambiente y nuestros territorios a resolver el problema de la basura que por ley les corresponde. Dando respuestas reactivas a los estudios del agua realizadas por la Universidad Autónoma Metropolitana donde comprueban la contaminación de los pozos noria en un radio de 500 a 2 kilómetros por lo menos, señalando que ellos ya hicieron estudios (que no muestran) y que el agua no está contaminada y que los que defendemos nuestro territorio, agua y medio ambiente somos necios, pidiendo la intervención de la Secretaría de Gobernación federal, suponemos para solicitar que ellos nos repriman y no asumir ellos el costo político.
“2. Que con indignación y enojo vemos cómo, en lugar de buscar donde depositar la basura, los gobiernos buscan seguir sacando dinero de la basura a costa del medio ambiente, como en San Francisco Tláloc, municipio de San Matías Tlalancaleca, donde el presidente municipal comenzó a decir a los municipios vecinos que en una barranca podían depositar su basura y luego la quemaba, cobrando suponemos por esa contaminación ambiental al pueblo de Tláloc, clausurando la Secretaría de Medio Ambiente del Estado el tiradero de basura en la barranca, pero dejando prendido el fuego de la basura que por días sigue afectando a Tláloc.
“3. Misma actitud ha tenido el gobierno de Juan C. Bonilla quien ha anunciado que ha contratado la renta de camiones (a pesar de tener camiones de recolección) y de un terreno en el municipio para tirar irresponsablemente ahí su basura, así mismo en San Salvador El Verde sucede una cuestión semejante. Mientras el gobierno del estado, en lugar de apoyar a los municipios en organizarse para distribuir la basura en los otros 12 rellenos sanitarios que tiene en las regiones de Atlixco, San Martín Texmelucan y Zona Metropolitana, prefiere que la basura este en las calles y echarnos la culpa a quien está tratando de resolver el problema.
“4. Lo mismo que en esta región, sucedió por casi 30 años en Santa María Coapan, con un basurero completamente irregular que contaminó los mantos acuíferos de Tehuacán y el Area Natural Protegida Cuicatlán-Coxcatlán, donde las compañeras y compañeros tuvieron que realizar una lucha ejemplar para cerrar un basurero en sus bienes comunales que les ha causado enfermedades mortales como cáncer.
“5. Que los pueblos que somos sacrificados para recibir la basura de las ciudades, somos los que más separamos la basura, evitando echar al camión de recolección la basura orgánica, pues la ocupamos para el campo y nuestros animales, así como separamos lo reciclable, pero cuando llega el camión todo lo revuelve. Sin embargo, estamos perdiendo muchas de nuestras costumbres de cuidar el medio ambiente por la influencia del capitalismo y la modernización, por lo que debemos regresar a nuestras prácticas ancestrales amigables con el medio ambiente.
“6. Que como humanidad hemos estado en la tierra cientos y miles de años y no teníamos este problema de la basura, hasta estos tiempos donde las empresas son las que producen la basura para vender masivamente sus productos que desplazan la economía local, nos hacen daño a la salud y son más caros. Por lo que la sociedad se ha vuelto más consumista y compra basura que además es cara”.