El conflicto religioso que se padece en San Pedro Benito Juárez ha escalado esta mañana debido a que el presidente de esa junta auxiliar de Atlixco, Gabriel Silva Lozano, pretendió utilizar a la fuerza policial para ingresar al templo que permanece cerrado desde el sismo de 19 de septiembre de 2017.
Vecinos de esa población cercana al volcán Popocatépetl relataron que el alcalde subalterno convocó a una asamblea para desconocer a los mayordomos y fiscales que han defendido el estatus de parroquia para San Pedro, que pretende arrebatar sin justificación la arquidiócesis que encabeza en Puebla Víctor Sánchez Espinosa.
Sin el consenso del pueblo, abundaron las fuentes, el alcalde ordenó a policías ingresar a la iglesia, lo cual generó el enojo de quienes han respetado los usos y costumbres de la comunidad y siguen reconociendo a los fiscales y mayordomos que iban a ser defenestrados.
Hubo jalones y algunos golpes, pero la situación no pasó a mayores, aunque hasta ayer por la noche permanecía la tensión en esa junta auxiliar.
Desde diciembre de 2021 feligreses de San Pedro Benito Juárez denunciaron que el arzobispado de Puebla, encabezado por Víctor Sánchez Espinosa, pretende quitarle a su iglesia la jerarquía de parroquia, con el verdadero propósito de quitarle al pueblo la custodia de un códice prehispánico.
El 9 de agosto del presente año La Jornada de Oriente dio a conocer que defensores del códice prehispánico que obra en el archivo parroquial de San Pedro Benito Juárez, además de fiscales y mayordomos, tramitarían una denuncia penal en contra del presidente de esa junta auxiliar, Gabriel Silva Lozano, por haber usurpado funciones que no le corresponden al pretender destituir a las autoridades religiosas elegidas por ese pueblo del municipio de Atlixco, lo cual constituye una transgresión a sus usos y costumbres.
Los agraviados dijeron que Silva Lozano mintió en una sesión de cabildo celebrada el pasado 17 de junio, afirmando a los asistentes que los fiscales y mayordomos que han protegido el códice y exigido a la Arquidiócesis de Puebla que reconozca a San Pedro como parroquia, habían renunciado a su cargo.