Zapotilán Salinas. La extracción de piedra en cerros de este municipio, a través de dinamita, ha puesto en alerta a los pobladores quienes piden la intervención de las autoridades para detener esa práctica hasta que las empresas que la llevan a cabo demuestren que cuentan con todos los permisos para esa actividad, dado que las piedras lanzadas por la explosión caen cerca de viviendas y caminos, así lo manifestó Primitivo Pablo Cortés Salas, presidente del Comisariado de Bienes Comunales en Zapotitlán.
Detalló que por el momento son dos sitios donde han hecho constantes detonaciones para sacar piedra, material que se procesa en molinos del mismo municipio para luego vender el producto a la empresa Incubadora Mexicana S.A de C.V (IMSA), con sede en Tehuacán, dedicada a la industria pecuaria.
A pesar de que la extracción de piedra es una actividad que ya tiene muchos años de realizarse en Zapotitlán, el líder de los comuneros señaló que a la fecha nadie sabe a quién pertenece esa empresa, ya que cada vez que las autoridades realizan alguna supervisión en los molinos de piedra las personas que ahí laboran dicen desconocer el nombre de los propietarios argumentando que ellos solo son trabajadores, lo cual ha generado sospechas en el sentido de que está trabajando de manera ilegal.
Por lo anterior manifestó que es necesaria la intervención tanto de la Procuraduría Federal de Protección del Ambiente (Profepa), como de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la primera para definir el impacto ambiental que esa actividad puede causar, sobre todo si se toma en cuenta que se realiza en un perímetro que está dentro de la Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán y en el caso de la Sedena para verificar si la empresa cuenta con los permisos para la posesión y el uso de dinamita.
Resaltó que se debe determinar el estado de los cerros donde se hace la extracción de la piedra, porque en La Peñita ya son varios los boquetes que se hicieron y hay el temor de que con alguna lluvia o sismo pueda colapsar.
Aclaró que si las autoridades determinan que se cuenta con todos los permisos y ese trabajo no pone en peligro ni a los habitantes ni al ecosistema, el Comisariado no se opondrá a que continúen con su labor, pero hasta que se aclare la situación de la empresa solicitó que suspendan actividades.
Confió en que con la llegada de las nuevas autoridades tanto federales como municipales se logre una mayor coordinación para el cuidado de la Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán, ya que se trata de un área natural protegida de gran importancia no solo para la región o el país, sino para el mundo.