En 2015 la saga dedicada a una de las películas de James Bond (007: Spectre) tomó como “inspiración” al Día de Muertos en la Ciudad de México. Fueron por diez minutos que el protagonista, tuvo una riña por las calles de la metropolí en medio de un desfile de calaveras gigantes y carros alegóricos alusivos a esta festividad mexicana.
Al año siguiente el exjefe de Gobierno de la Ciudad de México Miguel Ángel Mancera y el exsecretario de Cultura Eduardo Vásquez anunciaron el primer desfile de calaveras del Día de Muertos en CDMX. Y su argumento para crear un desfile tan grande fue que “después de la película de James Bond, los turistas querrián venir a verlo y no lo encontrarían”.
Cada año desde el 2016, excepto en 2020 por la epidemia de Covid-19, se ha realizado este desfile en las principales calles de la Ciudad de México; este año se prevé que las festividades de Día de Muertos y la atracción del desfile podría dejar una derrama económica de 41 mil 198 millones de pesos.
Algo similar pasaría en 2013 cuando la marca de Walt Disney solicitó el registro de la frase “Día de Muertos” para una de sus películas como marca comercial, esto con el fin de que nadie más pudiera lucrar con ella, siendo Disney la única en poder vender ropa, joyas, relojes, y demás productos que incluyeran esa frase.
Una de las portavoces de Disney, Mónica Ortiz Uribe declaró a CNN México que “la marca comercial buscaba proteger cualquier título potencial de la película o cualquier actividad relacionada.
Desde entonces, se ha determinado que el título de la cinta cambiará y –por lo tanto– estamos retirando nuestra aplicación para registro de marca registrada”.
#Disney keeps its promise. Check online and you’ll see their filings for #DíadelosMuertos are, well…Muertos pic.twitter.com/TKaLfrzoza
— Mónica Ortiz Uribe (@MOrtizUribe) May 9, 2013
Y aunque la empresa norteamericana desistió en esta solicitud por el rechazo de la comunidad mexicana que reside en Estados Unidos, la empresa no dejó de lucrar con esta festividad ya que después de la negativa, Disney decidió cambiar de nombre a su film por el de “Coco”, que posteriormente dejó una derrama económica en taquillas por más de 800 millones de dólares, el doble del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2024, esto sin contar la mercancía que comercializa de la película animada.
Tal pareciera que la industria de Hollywood le gustaría esta celebración para enmarcar lo valiosa y lo rica que es culturalmente a nivel internacional ¿o este será un intento de apropiación cultural o tal vez forme parte de una nueva etapa en la modernidad mexicana?
Apropiación cultural de Hollywood versus Modernidad mexicana
Toda sociedad, alrededor del mundo, se ve reflejada en sus expresiones culturales, a través de la música, la literatura, el arte y, desde hace un tiempo, también de la televisión y el cine. El escritor mexicano Carlos Monsivaís definió la representación social como
“una modalidad particular del conocimiento, cuya función es la elaboración de los comportamientos y la comunicación de los individuos. Es un corpus organizado de conocimientos y una actividad psíquica en la cual los hombres hacen inteligible la realidad física y social”.
¿Pero qué pasa cuando dicha representación social viene de culturas dominantes? Los medios de comunicación son un efectivo canal por el cual las voces pueden hacerse oír y a su vez representar a una sociedad o comunidad. Una situación que podría utilizarse para avanzar hacia la justicia y la igualdad o estereotipar a etnias completas y representarlas de manera incorrecta, e incluso robar la voz de un pueblo.
De acuerdo con la escritora James en 2015, la apropiación cultural se define como una dinámica de poder, en la cual miembros de una cultura mayoritaria o dominante toman elementos de otra cultura que ha sido reprimida por la primera.
Y esta a su vez es relacionada con los estereotipos representados en los medios de comunicación, en este caso del cine, por lo que observamos culturas dominadas a través de la visión subjetiva de aquellas que son dominantes y forman parte del control indirecto que hoy conocemos como neo-colonización.
Sin embargo la movilización cultural ha sido parte de la modernidad mexicana en la que se han utilizado y recombinado los distintos elementos del stock cultural y la cultura mediática para crear nuevos elementos, mismos que han influido en la industria y tradiciones de comunidades.
Para el historiador francés, Michael de Certau la movilización de la cultura genera riqueza y aquellos que no entiendan esto harán que factores o toda la cultura de un pueblo esté destinada a morir, y ante la posibilidad de una modernización desenfrenada quedan realizar prácticas de diferencia razonada para fortalecer intercambios y relaciones culturales para aprender a determinar elecciones entre los instrumentos impuestos por la industria cultural.


