Un grupo de ex trabajadores de la Secretaría de Gobernación del estado (Segob) que se autodefinen como despedidos injustificadamente denunció al extitular David Méndez Márquez -quien dejó el cargo para buscar una diputación- de presuntos actos de corrupción y nepotismo, por lo que demandó su reincorporación laboral.
A través de una carta de cuatro hojas que hicieron llegar a la cuenta de facebook del precandidato de Morena se le acusó de supuestamente despedir a personas con incapacidad médica para meter en su lugar a familiares y amistades.
Durante su paso por la Secretaría de Gobernación, señalaron que en menos de un año se otorgaron las más altas plazas y “jugosos” salarios a un grupo de amistades, en contubernio con la líder del sindicato de burócratas y acuerdos, Myrna Zaldívar Mendívil.
Destacaron que dejaron a un lado a trabajadores con muchos años de servicio que esperaban incorporarse a la planta laboral conocida como de base o subir de escalafón en espera de una jubilación.
Informaron que uno de los casos es Claudia Jeanette Naveda Díaz, quien llegó a la Oficina del exsecretario haciendo funciones de secretaria con el puesto de Analista Especializado Consultivo “B” y un salario neto de 19 mil 653.61 pesos. A los pocos meses –dijeron- ya contaba con una plaza de Oficial “R” (la más alta del personal de base) y un salario mensual neto de 20 mil 391.39.
También mencionaron a Oloxu Mascarúa Álvarez, cuñada de David Méndez, quien ingresó a finales de marzo de 2020 en el área de Relaciones Públicas, como personal de honorarios y un sueldo neto mensual de 6 mil 193 pesos. Para finales de año, expusieron que desapareció el área y la cuñada fue llamada para que se presentara a la Oficialía de Partes pero ya con una base de Oficial “A” y un salario mensual de 16 mil 666.28.
Otro caso exhibido fue el de Belén González González, quien estaba en la Subsecretaría de Desarrollo Político y después fue beneficiada con la categoría de Oficial “A”, adscrita a la Dirección de Recursos Materiales y Servicios Generales, con un salario mensual neto de 18 mil 316 pesos.
En la misiva además enlistó a Arely Aca Vázquez, quien pasó de Oficialía de Partes como personal de honorarios, donde percibía mensualmente 8 mil 486 pesos, a Analista Especializado Consultivo “C”, con un salario de 13 mil 171.30.
Asimismo, mencionaron a Rosalba Hernández Martínez, personal de honorarios en la oficina del subsecretario de Desarrollo Político con un salario de 13 mil 928 pesos, que al terminar el año fue adscrita a la Oficina del secretario como Analista Especializado Consultivo “B”, con un salario mensual neto de 21 mil 653.
Los despedidos señalaron que estos cambios “ordenados” por la entonces jefa de oficina, Érika Luna Tovar, se dieron en medio de arbitrariedades y prepotencia, pues nunca hubo puertas abiertas y menos para personas ajenas a su grupo de allegados.
“Hubo muchos despidos injustificados y sin notificar, como el caso de quien ocupaba la Oficialía de Partes, la cual se encontraba con incapacidad médica y el mismo día que concluyó le pidieron que firmara su renuncia sin ninguna explicación; otros más que fueron dados de baja se enteraron porque no llegó su salario y al preguntar les dijeron que fueron indicaciones superiores”, denunciaron.
Al final, los trabajadores despedidos confiaron que la sensibilidad de la primera mujer secretaria de Gobernación, Ana Lucía Hill, los escuche y tome cartas en el asunto que beneficie a quienes han entregado su vida al servicio público.
“Pedimos se acabe con el nepotismo, el amiguismo y el dedazo”, reclamaron.