Tras 15 horas de cómputo de votos que incluyó el recuento de 55 paquetes electorales, el Instituto Electoral del Estado (IEE) declaró a Juan Lira Maldonado ganador de la elección de presidente municipal de Chignahuapan.
Con el respaldo de Fuerza por México (FxM), Lira obtuvo 10 mil 565 sufragios, superando con esto al abanderado de Morena, Juan Rivera Trejo, quien logró 7 mil 002 votos.
El Consejo General del Instituto Electoral del Estado (IEE) modificó su determinación inicial de negarse a declarar la validez de esos comicios en junio pasado, a fin de acatar una sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
El IEE argumentó múltiples irregularidades en la custodia de votos, pero el TEPJF determinó que eso no era motivo para negarse a cumplir sus responsabilidades.
El Consejo General cotejó 30 de los 85 paquetes electorales de Chignahuapan y recontó 55 de los mismos; a partir de lo anterior se obtuvo que la planilla ganadora correspondió al partido político local FxM.
Con el resultado validado, el IEE entregará la constancia de mayoría a Lira Maldonado como presidente municipal electo. Además, asignó regidurías de representación proporcional a los partidos PRI, PAN, Morena y PRD.
Si el TEPJF ratifica el cómputo del instituto, Juan Lira rendirá protesta de cargo el 15 de octubre próximo, para mantenerse en funciones durante tres años, tras los cuales podría buscar la reelección.
PAN y PRI contra la elección de Chignahuapan
Durante el cómputo de votos que inició a las 14 horas del 9 de octubre y concluyó cerca de las seis horas del día siguiente, la representación del PRI del Consejo General, a cargo de Elizabeth Torres Villegas, acusó la detección de errores en actas que exhibieron una posible manipulación de resultados.
Torres además insistió en que hubo una violencia generalizada en Chignahuapan tras los comicios, junto con su homólogo del PAN, Óscar Pérez Córdoba Amador.
En respuesta, el representante de FxM, Julio Antonio Saucedo, pidió a los críticos de la elección de Chignahuapan tener cuidado con el término violencia generalizada, pues el que lo señale está obligado a probarlo en los tribunales.