Convocados para discutir, y en su caso aprobar, un conjunto de modificaciones a distintas leyes, entre otras como las que contemplan la desaparición del Instituto de Salud para el Bienestar ( Insabi), la desaparición de la Financiera Rural, la transformación de lo que era el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT) por el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovaciones (CONAHCYT), que considera como derecho humano a la ciencia y sus resultados, incluso, la aparición de una línea aérea manejada el Ejército Nacional (https://www.quadratin.com.mx/opinion/retos-y-perspectivas-de-las-reformas-en-el-senado-de-la-republica/).
Sabedores de la importancia de este paquete de reformas, los senadores de la oposición se negaron a trabajar por lo que se les paga: legislar. Y no sólo eso, tomaron la sede del Senado, sin faltar la exhibición de una senadora encadenada, tratando de impedir que los senadores de mayoría legislaran, como es su obligación y para cumplirla buscaron una sede alterna hacia donde se trasladaron y resulta que también fue tomada por la oposición; en consecuencia, los senadores tuvieron necesidad de legislar en el patio del Senado. Los bloqueos resultaron inútiles y, en cosa horas, se dice que poco más de cinco, los legisladores de mayoría aprobaron el paquete de 20 reformas enviadas por la Cámara de Diputados, donde fueron aprobadas inicialmente.
Llamaron albazo legislativo lo ocurrido, pero los opositores conocieron paso a paso el proceso seguido para instalar la plenaria, proceso que si fue tortuoso fue debido a los obstáculos que levantaron los senadores del PRIAN–PRD.
Como no legislan y tienen complicidades que detienen cualquier iniciativa proveniente del gobierno de la Cuarta Transformación, ya conocen el camino que conduce a la Suprema Corte y lo recorren presurosos, no sin antes lanzar una retahíla de improperios y ofensas, sin faltar por supuesto, las referencias al autoritarismo presidencial y los malos augurios, por ejemplo, que amenaza la crisis, pero si la economía creció el año pasado 3.1 por ciento y, en el primer trimestre de 2023, el crecimiento fue de 3.9 por ciento, entonces los analistas contundentes y alzando la nariz, afirman: “pero se descontrolará la inflación”. En fin, esto deja ver que la esperanza de sobrevivencia de los conservadores, radica en que le vaya mal al país, de lo cual culparían al presidente Andrés Manuel López Obrador, si eso ocurre. ellos podrían ganar las elecciones de 2024.
La decisión de los senadores de sesionar en una sede alterna, lo cual no es ilegal, fue acertada, pero no fue la única decisión, otra de ellas le correspondió tomar al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien decidió presentar. Por la vía diplomática, una enérgica protesta por el proyecto del gobierno de Estados Unidos de elevar el monto de los recursos destinados a las organizaciones no gubernamentales (ONGs), que operan en México financiadas por la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés): “¿Cómo le van a estar dando dinero a una institución que abiertamente está en contra de un gobierno legal y legítimo, democrático? ¿Cómo van a financiar opositores desde el exterior? ¡Eso es violatorio de nuestra soberanía, es intervencionismo!”, explicó el presidente al anunciar que enviaría la protesta al gobierno estadounidense.
Las organizaciones, mencionadas por el presidente como receptoras de recursos de la USAID, fueron México Evalúa, Artículo 21 y Mexicanos contra la Corrupción, que maneja como patrimonio personal uno de los líderes de la oposición al gobierno de la Cuarta Transformación.
Es difícil que prospere la propuesta del gobierno mexicano, pues la USAID es un instrumento privilegiado del Departamento de Estado que así interviene para que organizaciones del país intervenido difundan el neoliberalismo, sus valores y principios, además de encargarse de penetrar, dividir y desestabilizar a los gobiernos que no son gratos a Washington. Por eso, por hacer el trabajo sucio al imperialismo, es difícil que dejen de financiar a las ONGs amigas de Estados Unidos. De cualquier manera, ahí está la denuncia como testimonio de la intervención estadounidense en México y otros países, mediante personajes que no saben lo que es la soberanía nacional.