La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) invalidó finalmente la pasada semana los triunfos que Marco Valencia Ávila en Venustiano Carranza y Juan Lira Maldonado en Chignahuapan obtuvieron en las elecciones del pasado 2 de junio y ordenó repetir los comicios. Mientras que el Congreso del estado integró dos Concejos Municipales para que hagan las funciones de gobierno, mientras se organizan las elecciones extraordinarias.
En el caso de Venustiano Carranza, la Secretaría de Gobernación informó la pasada semana también que partidarios de Valencia se incorporarán al Concejo Municipal que gobernará el municipio con el fin de garantizar la gobernabilidad, mientras que en el caso de Chignahuapan ha existido reticencia y manifestaciones de inconformidad por los partidarios de Lira Maldonado.
Ayer la presidencia estatal del PRI alertó que imperan condiciones de ingobernabilidad en Chignahuapan tras la anulación de los comicios, debido a que la Secretaría de Gobernación no ha logrado un acuerdo con el grupo inconforme de Juan Lira Maldonado que permita la operación del Concejo Municipal en su totalidad y condiciones de gobernabilidad en el municipio.
Dos hechos resaltan en el vacío de autoridad que se vive en Chignahuapan: uno es la cancelación del Festival de Luz y Vida, que es uno de los eventos más relevantes de ese municipio, que atrae un número importante de visitantes y dinamiza la actividad social y económica municipal y la crisis de servicios públicos, como es la recolección de basura y de limpieza. En este último caso el organismo operador de Zacatlán se ha encargado de brindar el servicio de recolección de residuos, aunque hasta el momento se ignora por cuánto tiempo durará ese apoyo y qué costo tendrá para el erario del primer municipio, mientras que actores locales se han organizado para sumarse a las tareas de limpia.
En fin, el desaseo que se ha observado en las resoluciones de los órganos electorales sobre estos municipios puede costar, en el caso de Chignahuapan, un vacío de autoridad y una serie de conflictos que pueden escalar de no llegarse a un acuerdo hasta que se organicen las próximas elecciones.