A petición de colectivas feministas de Tehuacán y Puebla, observadores de la Comisión de Derechos Humanos (CDH) Puebla llegarán a la ciudad para vigilar la marcha del 8M y documentar cualquier acto de represión que pueda ocurrir contra las manifestantes.
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La activista feminista Hayde Contreras Marín explicó que esta solicitud surge ante las amenazas del regidor de Gobernación, Alejandro Flores Trujillo, quien advirtió que habría sanciones contra las mujeres que realicen pintas durante la movilización.
Contreras Marín, integrante del Observatorio Nacional Ciudadano de Feminicidios y de la organización Mujeres Trabajando en Pro de los Derechos Humanos, criticó el doble discurso del gobierno de Tehuacán, encabezado por Alejandro Barroso. Señaló que, aunque se promueven acciones en favor de las mujeres, también se les criminaliza, desprecia y persigue.
Como ejemplo, mencionó la situación de las mujeres vendedoras de hierbas medicinales de San Antonio Cañada, quienes fueron desplazadas de sus espacios de venta bajo el argumento de limpiar el centro de la ciudad del comercio ambulante. Sin embargo, fueron las únicas en ser reubicadas en un sitio con menos visibilidad y espacio.
La Alerta de Género vigente en el municipio obliga al gobierno a contar con un diagnóstico completo sobre la violencia de género, incluyendo estadísticas precisas de casos, perfiles de víctimas y otros datos clave. Sin embargo, según la activista, el gobierno de Tehuacán no cumple con esta obligación.
Tras las declaraciones de Alejandro Flores, Contreras Marín advirtió sobre el riesgo latente de represión durante la marcha del 8M. Por ello, considera valiosa la respuesta positiva de la CDH Puebla para monitorear la manifestación y garantizar que el gobierno municipal actúe con respeto a las feministas.
Se espera que la presencia de los observadores contribuya a que las autoridades se abstengan de ejercer violencia contra las centenas de mujeres que saldrán a las calles a exigir sus derechos.