Agentes de la Fiscalía General del Estado catearon este jueves un domicilio en la calle Gasoducto, en la junta auxiliar de San Pablo Xochimehuacan, ubicado a 200 metros de la explosión del domingo pasado que hasta el momento ha cobrado la vida de dos personas, donde los vecinos denunciaron la existencia de una toma clandestina que ya había sido sellada pero que se mantenía sin vigilancia.
Fue después de las 18 horas que inició el operativo de seguridad en el domicilio donde los vecinos revelaron que había un tubo expuesto y advirtieron el riesgo de que en cualquier momento pudiera registrarse una fuga de hidrocarburo o se intentara volver a abrir.
Hasta el momento se desconocen los resultados de la movilización en la que también participaron agentes de la Policía estatal y de la Guardia Nacional.
No obstante, se descartó el decomiso de una pipa de gas como se manejó en algunas versiones periodísticas.
Fuentes de seguridad revelaron que el miércoles pasado se decomisaron dos pipas de gas en las inmediaciones, una cerca de Barranca Honda en donde se detectó la segunda toma clandestina después de las explosiones, y otra en la junta auxiliar de San Jerónimo Caleras.
Después de la que se incendió el domingo se han identificado al menos otras dos tomas clandestinas en Xochimehuacan, la primera ubicada en el domicilio cateado este jueves, la cual ya se encontraba sellada y la segunda cerca de Barranca Honda, en la misma junta auxiliar.
Hasta el momento no hay registro de algún detenido relacionado con este delito en la población o con las explosiones del domingo.
Cabe recordar que los damnificados de la explosión narraron a principios de esta semana que el corredor de la avenida Ferrocarril hasta la central de abasto está repleto de tomas clandestinas.
Denunciaron la supuesta renta de predios o de viviendas para hacer extracción de gas como sucedió con la toma clandestina que registró una fuga y explosión sobre la avenida Ferrocarril.
En un recorrido por la llamada zona cero los afectados afirmaron que desde hace meses han sido testigos de la operación de presuntos huachicoleros que han optado por rentar y en algunos casos invadir predios en la junta auxiliar para realizar este delito.