Lejos de la crisis que aqueja a partidos no solo en México, sino a nivel internacional, Movimiento Regeneración Nacional (Morena) exhibe un vigor que en este momento difícilmente puede presumir cualquier otra fuerza política en el mundo, lo que se refleja en la reciente afiliación de casi 3 millones de mexicanos a su militancia, aseveró ayer Rafael Barajas Durán, “El Fisgón”.
Más conocido con su legendario alias, “El Fisgón”, Rafael Barajas hizo ayer en el Aula Virtual del Complejo Cultural Universitario de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), una reseña de las aportaciones que su generación hizo al cambio democrático en el país, que derivó en una apología de los logros de la Cuarta Transformación Pública del País.
En esa ruta, cuando el exderechista, Ricardo Villa Escalera, pretendió recriminar que no había cambios sustanciales con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y acusó al actual partido oficial de carecer de un proyecto concreto, el célebre monero, que es presidente del Instituto Nacional de Formación Política de Morena, pidió que los asistentes levantaran la mano si en su hogar reciben recursos de alguno de los programas del gobierno de la República, como las Pensiones para el Bienestar, Jóvenes Construyendo El Futuro, Sembrando Vida o las becas para estudiantes y grupos vulnerables.
La mayoría del auditorio -en el que primaban estudiantes universitarios- alzó el brazo, y entonces “El Fisgón” expresó: “Eso no se recibía antes, es un cambio sustancial, es la adquisición de un derecho por lo que estamos luchando”.
Así, sin proponérselo, en vísperas del cuarto informe de gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el caricaturista hizo una síntesis de las transformaciones que se han consumado en este sexenio:
“Si empezamos a revisar los cambios importantes que han ocurrido en la vida cotidiana desde que llegó López Obrador a la presidencia, vamos a encontrar cosas muy importantes: por primera vez hay inversión social, no hay un solo acto de represión a nivel federal como los que teníamos en sexenios pasados, es posible que a nivel local sí, pero esa es otra historia; ha subido el salario mínimo de manera consistente, hay nuevos derechos sindicales, se está luchando por la soberanía energética. Se están rehabilitando seis refinerías, se compró Deer Park, se está construyendo Dos Bocas, vamos a ser autosuficientes en unos cuantos meses; el litio se está peleando porque sea mexicano, ya no se están dando concesiones a las mineras como se hacía antes, se está rescatando el sector eléctrico, la verdad es que las ventajas son enormes, los cambios sí son muy, muy importantes”.
Luego se refirió a Morena y explicó: “Sí tenemos algunos problemas al interior de la organización del partido. Esto quiero decirles que ocurre con todos los movimientos de izquierda que triunfan. Todos los movimientos progresistas de la última década, que han llegado al gobierno, todos pasaron por una crisis similar, en Brasil, en Bolivia, en Argentina. Y esa crisis se debe a lo siguiente: estos partidos tienen un número específico de cuadros, llegan al gobierno y ¿con quién creen que gobiernan?, pues con sus cuadros, que son lo que organizaban abajo, entonces en todos estos países el partido se vació de cuadros y a Morena lo que le pasó fue eso, todos los organismos de Morena, sobre todo a nivel estatal, quedaron truncos. Todos los comités de Morena quedaron sin dos, tres hasta cuatro carteras, algunos quedaron casi vacíos”.
No obstante, apuntó: “Sin embargo, yo estoy convencido de que el movimiento sí se está reestructurando. Ya comienza a haber un trabajo de reestructuración local, todos los comités estatales están completos y no se nos olvide que hace unas semanas se dio un proceso de reafiliación masivo y se afiliaron cerca de 3 millones de gentes, perdón, ese no es un partido en crisis, es un fenómeno distinto y se está reconfigurando ese partido”.
“El Fisgón” abundó: “Yo sí quiero decirles que no veo muchas perspectivas de que la oposición se reconstruya de aquí al 24. Todas las encuestas dan por sentado que va a ganar el Movimiento de Regeneración Nacional. Pero además, yo sí creo que este movimiento sigue concentrando la esperanza de un montón de gente y entonces, ese debate vamos a darlo en las urnas. Y creo que la parte activa del país está ahí, en el movimiento, que por supuesto que tiene problemas y por supuesto que hay que revisar cómo se están operando un montón de cosas, pero también creo, es un hecho que se está planteando en el próximo congreso de Morena, se vote por un programa y ese sea el programa que se tenga que seguir. Sí existe proyecto y es un proyecto importante”.
Entonces, Rafael Barajas, “El Fisgón”, aseveró: “El proyecto es muy fácil: la suma de las demandas históricas del pueblo mexicano, la defensa de la soberanía, la defensa de los derechos sociales, la defensa de la libertad de expresión, la defensa de una nueva generación de derechos, los derechos de las mujeres, todo eso”.
“Sí creo yo que hay un montón de expresiones locales de Morena que tienen problema muy serio y que hay que revisar, sin lugar a dudas, esto está fuera. Pero también creo yo que seguimos ante un movimiento en ascenso, prueba de ellos son los dos y medio o tres millones que se afiliaron hace poco. Dime tú, ¿qué otro partido en el mundo tiene 2 o 3 millones de afiliados?, yo creo que solo el Partido Comunista Chino, no hay mucho más”.
Debate
En la charla de “El Fisgón” lo acompañó Aurelio Fernández Fuentes, director de La Jornada de Oriente y moderó Georgina Tenorio, directora de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la máxima casa de estudios.
Aurelio Fernández inició recordando que conoció a Rafael Barajas cuando él estudiaba en la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el hoy monero era su contemporáneo, pero como alumno de Arquitectura. Señaló que los estudiantes “tratamos de hacer transformaciones”, radicales en el país, “pero fracasamos porque seguimos igual”.
El “Fisgón” discrepó, argumentando que la generación a la que él y Fernández pertenecen fue la que logró que la Cuarta Transformación Pública del País llegara al poder, aunque admitió que hubo expectativas de su tiempo que no se cumplieron, porque el neoliberalismo impuso un sistema de valores individualistas que ahora tienen en jaque la vida humana en el planeta.
Fernández expresó su desacuerdo con el pregón de objetividad periodística que se suele hacer desde los medios de comunicación, argumentando que siempre se tiene una posición política. Parafraseando a Marx, consideró pertinente preguntar cuál es el opio actual del pueblo, asegurando que se trata del consumismo.
Barajas señaló que la objetividad sí existe, pero son los grandes medios los que la tergiversan para servir al sistema capitalista dominante.
Antes de la conferencia, en la que también hubo preguntas y cuestionamientos de los jóvenes estudiantes, Rafael Barajas tuvo un encuentro en la Librería de la UAP, con la rectora Lilia Cedillo Ramírez.