Aunque aseguran que no se suspenderán inversiones ni se irán de México, integrantes en Puebla de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) afirman que la cancelación del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México tendrá un impacto negativo en esta entidad.
El vicepresidente del sindicato patronal, Juan Manuel Díaz de Rivera Schimdt Kunitz, dijo que por la cercanía que tiene Puebla con la nueva terminal aérea le representaba la oportunidad de la llegada de más capital, inversiones y turismo, lo cual se perderá.
Agregó que para la agrupación la consulta no tiene validez porque fue convocada por Andrés Manuel López Obrador, al que consideran “un ciudadano” más que todavía no tiene ninguna autoridad para tomar decisiones.
En todo caso, este tipo de ejercicio, consideró, se debió hacer con base en la Ley Federal de Consulta Popular, en vigor desde 2014, reglamentaria del artículo 35, fracción VII de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicano.
“El tema del aeropuerto puede convertirse en la Casa Blanca de Andrés Manuel López Obrador”, previó el vicepresidente.
Opinó que es delicado que el presidente electo este utilizando precisamente la consulta ciudadana al margen de la ley, con un dudoso diseño técnico y con resultado no representativo ni democrático, a fin de sacar adelante una idea que ya tenía cocinada, con un resultado previsto.
A los patronos, insistió, les preocupa no saber qué va a pasar porque tirar 120 mil millones de pesos por la borda es un costo muy alto para los mexicanos.
Por ahora, al menos la Coparmex en Puebla descarta interponer algún recurso jurídico para echar abajo la cancelación del nuevo aeropuerto. Díaz de Rivera consideró que deben ser los directamente afectados quienes tomen una decisión al respecto.
Mientras tanto, expresó que es difícil saber qué ocurrirá cuando en diciembre arranque la administración de López Obrador, solo sabe que está en juego el futuro de muchos negocios.