Cuando menos 35 camiones pesados han sido robados en el presente año a agremiados al Sindicato 3 de Mayo, reportó el asesor general del mismo, Rafael Carbarín Ramírez.
Entrevista detalló que 10 de las unidades les fueron arrebatadas en los últimos 15 días, cada una de las cuales vale hasta 2 millones de pesos y la mercancía que trasladan es mínimo de 300 mil pesos.
Las zonas más inseguras para los transportistas, dijo, son el Periférico Ecológico, en el tramo que va de la 11 sur a Amozoc; así como la zona de Esperanza.
Expuso que hasta el momento ningún chofer ha sido asesinado durante los atracos, pues tienen la instrucción de no oponer resistencia y entregar la unidad.
Asimismo, indicó que de los 35 camiones robados solo han recuperado dos, es decir únicamente 5.7 por ciento.
“Vamos a prepararnos para hacer un llamado al gobierno, que nos haga caso en las carreteras, vamos a empezar a tocar puertas; (las autoridades) no han hecho caso de nada”, sostuvo.
Al respecto, César Flores Ruíz, secretario general del Sindicato 3 de Mayo, manifestó en entrevista que a él le han robado tres camiones, pero que esto es solo una parte la inseguridad, ya que también les hurtan las llantas.
Esto ocurre específicamente en la lateral de la autopista México-Puebla, a la altura de la gasolinera de San Francisco Ocotlán, en donde al mes se presentan uno o dos casos en donde los conductores bajan a comprar a una tienda de conveniencia que ahí se localiza y al regresar al camión son abordados con delincuentes que los atan y les arrebatan las llaves.
Posteriormente ingresan el vehículo a esa u otra junta auxiliar de Coronango y les quitan los neumáticos.
Cada unidad tiene hasta 18 llantas y ha habido casos en donde se han quitado todas. El precio de cada una es de 5 mil pesos, si son de origen chino, y de 20 mil pesos si son de marca reconocida, por lo que la afectación económica puede ser de hasta 90 mil o 360 mil pesos.
“Dejan al camión en banquitos. Se orillan al Oxxo, los jalan a Coronango y los dejan sin llantas” indicó.
De todos los casos de robos de vehículos y de neumáticos, reconoció que escasas veces van a denunciar por el tiempo que necesitan invertir y porque las investigaciones nunca prosperan y los responsables quedan sin castigo.
En torno a cómo les han respondido las aseguradoras, manifestó que difícilmente les pagan y que el costo de las pólizas es cada vez más alto, puesto que les representan un mínimo de 30 mil pesos anuales por una unidad de modelo atrasado.