Nuevamente ayer una serie de bloqueos en importantes vialidades de Puebla paralizaron y entorpecieron la movilidad por varias horas de vehículos particulares y de transporte público, afectando las dinámicas ciudadanas de forma importante y generando la indignación de muchos que se sienten agraviados con esas medidas frente a las necesidades de otros actores de llegar a medidas extremas para que diversas autoridades atiendan las demandas planteadas.
Una de esas vías fue el Periférico Ecológico, cuando agremiados a la sección XXV del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA) pararon labores, protestaron y cerraron en dos ocasiones el Periférico Ecológico para exigir la remoción de la directora del Hospital General de Cholula, Elizabeth Laug; de Emigdio Bernardo Simeón, jefe de Recursos Humanos, y de la jefa de Enfermeras, Concepción Mota, a quienes señalan de ejercer acoso laboral.
Ayer también, bulevar Valsequillo a la altura de la UAP fue cerrado por estudiantes de esa institución como parte de las demandas y protestas, que tienen paralizada a la institución y que generó mayor congestionamiento vehicular y la búsquedas de vía alternas para circular.
Otro bloqueo carretero fue realizado en el crucero de San Felipe Hueyotlipan, ubicado al norte se la ciudad, para exigir a las autoridades la localización de una menor de 13 años, reportada como desaparecida la semana anterior sin tener avances del caso. El punto afectado conecta a Puebla con Tlaxcala, así como con las autopistas que conducen a México y Orizaba, y es el acceso principal a la Central de Autobuses de Puebla, por lo que el bloqueo generó un intenso tráfico vehicular y la molestia de muchos ciudadanos que circulaban por la zona. Por fortuna, la Fiscalía General del Estado encontró con vida a la menor.
El cierre de calles y carreteras se ha conformado como una acción de presión frente a la inoperancia de las autoridades para dirimir todo tipo de conflictos, así como en los temas de seguridad y la desaparición de personas que tanta angustia genera para las familias. Frente a ello, una ciudad más compleja, con un parque vehicular creciente y vialidades insuficientes para transitar con mayor tranquilidad hace que un cierre vial se vuelva un agravio para las personas que por ahí transitan, generando inconformidades y molestias, sin que por el momento exista una solución al respecto, ya que pareciera que solo así las autoridades correspondientes atienden las demandas.