El costo de la canasta básica alimentaria en Puebla tuvo una disminución marginal de 2 por ciento en septiembre, en comparación con enero de 2024. Es decir que en el arranque de este año adquirirla representaba un desembolso de mil 730 pesos y actualmente se necesitan mil 695 pesos, por lo que solo bajó 35 pesos.
Lo anterior con base en el monitoreo de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), misma que identificó a esta entidad dentro de las cinco que tienen los precios más bajos de dicha canasta.
De igual forma, se encuentra por debajo del promedio de mil 875.76 pesos registrado en el país, este último disminuyó 1.10 por ciento, que se traduce en 20.81 pesos menos.
No obstante, la agrupación también destaca que el descenso es marginal, ya que aunque se detuvo la tendencia al alza, los precios siguen estando elevados.
Nayarit es la entidad federativa donde resulta más costoso comprarla, ahí se requieren de 2 mil 122 pesos.
Mientras que los estados con las mayores variaciones al alza, son: Zacatecas, donde cuesta 4.63 por ciento más comprarla; en Durango subió 3.80 por ciento, 3.51 por ciento elevó en Tabasco, 3.26 por ciento en el Estado de México y 3.12 por ciento en Colima.
Algunos de los precios promedio vigentes de productos de la canasta básica en México, son: aguacate, 81.44 pesos; chile poblano, 47.06 pesos; papa, 34.66 pesos; jalapeño, 34.09 pesos; tomate verde, 32.59 pesos; y jitomate saladet, 31.73 pesos.
En tanto, el kilogramo de huevo ronda en 54.48 pesos; pan de caja, 50.65 pesos; aceite, 48.22 pesos; frijol, 43.34 pesos; sardina, 40.80 pesos; azúcar, 35.08 pesos; y leche, 28.59 pesos.
Dentro de los productos que más han encarecido en este mes, están el limón, que subió 17.65 por ciento; huevo, 5.74 por ciento; botanas, 5.08 por ciento; chuleta de cerdo, 4.96 por ciento, y sardina, 3.99 por ciento.
La Anpec refiere que la ligera disminución de precios es consecuencia de un fenómeno de deflación, que se produce al darse una reducción de consumo, ocasionando que la oferta sea mayor que la demanda, lo que obliga a los comercios a reducir sus precios para vender sus productos.
Agregó que también influyó el gasto que hicieron las familias para el regreso a clases, por lo que padres y madres tuvieron que sacrificar el consumo de algunos productos de la canasta básica.
Según la perspectiva de la alianza, esta baja marginal en los precios solo será momentánea.
Para el caso de Puebla, el costo más alto de la canasta alimentaria se presentó en agosto pasado, cuando llegó a mil 737.50 pesos; mientras que lo más bajo han sido mil 571 pesos, registrado en abril.