Aunque bodegueros de la Central de Abasto pidieron la intervención del ayuntamiento de Puebla para ponerle un freno a los abusos de Concesiones Integrales, la cual cortó el servicio de agua y drenaje en el principal centro de abasto, el edil capitalino Eduardo Rivera Pérez, afirmó que la autoridad municipal solo fungirá como intermediario.
A pesar de que el edil panista forma parte del Consejo Consultivo del Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Puebla (SOAPAP), organismo rector del agua potable, el munícipe afirmó que la autoridad municipal no tiene competencia jurídica porque en su opinión se trata de un conflicto entre empresa y usuarios.
El alcalde blaquiazul únicamente apeló a la “sensibilidad” de la concesionaria para desahogar deudas históricas que se tienen y acordar una cuota adecuada para poder saldarla y puedan continuar con el servicio.
“Nosotros no tenemos competencia ni jurídica, ni técnica, ni de responsabilidad en este caso concreto. Es una situación contractual entre la Central de Abasto y Agua de Puebla. Estamos en diálogo con ambas partes para encontrar una solución”.
Respecto a la inconformidad por parte de los comerciantes en el sentido de que Concesiones Integrales cobra cuotas elevadas, que en ocasiones no corresponden al giro comercial que corresponde, el edil afirmó que los comerciantes deben ser conscientes que “el agua cuesta” y se debe de pagar por ella.
“Tiene que haber una visión de responsabilidad de ambas partes. Tiene que haber una visión de corresponsabilidad de ambas partes. Este es un caso urgente para la ciudad e instruiremos a la gerencia y la Secretaría de Gobernación para que haya un acuerdo entre las partes”.
Manifestó que el ayuntamiento de Puebla le ha pedido la misma sensibilidad a la empresa respecto a los usuarios de las colonias, a los que Concesiones Integrales también les ha cobrado adeudos elevados.
Este martes, La Jornada de Oriente publicó que a la par de haber cortado el servicio de agua en la Central de Abasto, Concesiones Integrales hizo lo propio con el servicio de drenaje, confirmaron integrantes del Consejo.
En conferencia de medios, los consejeros encabezados por el secretario José Armando Huerta Mejía, informaron que lo anterior representa un problema sanitario, debido a que la empresa se niega a desazolvar las alcantarillas en donde corre una gran cantidad de aguas tratadas.
Los propios administradores de la Central de Abasto informaron que las aguas negras corren hacia la parte sur del centro de abasto, y se concentran en cuatro puntos y una planta de tratamiento.
Aunque afirmaron que hasta el momento no ha habido un desbordamiento de aguas negras, reconocieron que existe tal posibilidad.