El acuerdo alcanzado por el SITIAVW en Volkswagen de México marca un precedente perjudicial en el sector automotriz de Puebla y el país. La Federación de Trabajadores de Puebla (FTP-CTM), encabezada por Leobardo Soto Martínez, subrayó que este ajuste mínimo será el nuevo referente en las revisiones contractuales, debilitando la negociación colectiva y el poder adquisitivo de miles de empleados.
La crítica central de Soto Martínez no solo apunta contra la insuficiencia del aumento, sino también contra la actitud y los métodos del sindicato encabezado por Hugo Tlalpan Luna: “Ahora resulta que los que nos decían charros somos más libres que los mismos que se sentían independientes. El sindicato independiente es más charro que el charro”.
El secretario general de la FTP-CTM aseguró que ese porcentaje de 4 por ciento será utilizado por los empresarios de toda la rama industrial como tope en futuras negociaciones, imponiendo un estándar desfavorable para las bases laborales y perpetuando condiciones de debilidad sindical.
Puntualizó que la CTM ha conseguido aumentos de dos dígitos y tabuladores superiores, mientras en Volkswagen la dirigencia gremial optó por una negociación de mínimos que deja a la base sin respaldo real.
El desgaste del liderazgo sindical no es sólo interno. El dirigente de la FTP-CTM acusó directamente a Hugo Tlalpan Luna, secretario general del SITIAVW, de entregar la titularidad del contrato colectivo y negociar incrementos insuficientes en acuerdos previos con la empresa.
“La historia lo va a juzgar, nos va a juzgar a todos. Lo que sí es cierto es que los trabajadores están muy inconformes por su sindicato”, insistió Soto Martínez.
El cetemista reveló hay 17 empresas en Puebla que atraviesan situaciones críticas por la disputa de la titularidad de sus contratos colectivos, involucrando a más de 30 mil empleados que podrían ir a huelga ante la insuficiencia de respaldo gremial y la presión por mantener aumentos bajos.


