Coyomeapan. Cientos de personas despidieron a Sergio Cruz Nieto, activista político asesinado el pasado viernes en Tehuacán, en un acto fúnebre que movilizó a comunidades locales y de municipios cercanos. Sus amigos y familiares claman justicia por el crimen que ha generado indignación y condena a nivel nacional e internacional.
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Funeral multitudinario en Coyomeapan
El funeral comenzó en la casa del activista, donde se reunieron sus seres queridos y simpatizantes para acompañar su féretro hasta la parroquia local, donde se celebró una misa de cuerpo presente. Durante la homilía, el sacerdote recordó a Sergio como una persona alegre y solidaria, dejando un legado de valores positivos entre quienes lo conocieron.
El cortejo fúnebre recorrió las calles de Coyomeapan, con su féretro cargado en hombros, hasta llegar al Panteón Municipal. En medio de porras, canciones y lágrimas, sus restos fueron sepultados, dejando una profunda huella en la comunidad.

ONU-DH condena el asesinato
La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) emitió un comunicado condenando el asesinato de Sergio Cruz Nieto. La organización internacional destacó que el activista había solicitado su incorporación al Mecanismo de Protección para Periodistas y Defensores de Derechos Humanos, pero fue asesinado antes de recibir dicho respaldo.
El pronunciamiento de la ONU-DH exhorta a la Fiscalía General del Estado (FGE) a realizar una investigación exhaustiva, considerando los posibles intereses afectados por el activismo de Sergio. Asimismo, instó a fortalecer las estrategias de prevención y protección para garantizar la seguridad de los defensores de derechos humanos.
Exigen justicia y medidas de prevención
El caso de Sergio Cruz Nieto se suma a una preocupante lista de crímenes contra activistas y defensores de derechos humanos en México. La ONU-DH enfatizó la necesidad de implementar medidas urgentes para prevenir futuros ataques, mejorando las políticas existentes y actuando con mayor responsabilidad ante las amenazas.
Por su parte, familiares y compañeros del activista demandan que se esclarezca el crimen y se sancione a los responsables, mientras la comunidad de Coyomeapan permanece unida en su lucha por justicia y dignidad.
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