Alejandro Armenta Mier, candidato a gobernador de la coalición Sigamos Haciendo Historia (Morena-PT-PVEM-FxM-NA), reconoció que existe inconformidad al interior de la alianza por la selección de candidatos a alcaldes, pero aseguró que el frente está atendiendo el malestar para mantener la unidad.
“Habrá molestos, sí, pero no habrá desatendidos”, garantizó durante una conferencia de medios en la que fue cuestionado sobre el tema.
El también senador de la República aseguró que el trabajo de conciliación que realizan los integrantes de Sigamos Haciendo Historia es “muy complejo” porque participan más de 2 mil 500 aspirantes en el proceso de selección.
Agregó que él mismo acompaña las tareas de conciliación, asistiendo a reuniones que le solicitan durante los recorridos que efectúa por el estado y respondiendo llamadas desde que inicia su jornada laboral.
“Los partidos están haciendo su trabajo (…) de conciliación y dónde me toca a mí entrar, lo hago con mucho gusto, sin ninguna dilación”, afirmó.
Consideró que mantener la unidad de la Cuarta Transformación (4T) en Puebla será un “gran reto”, porque si el partido designa a un aspirante como abanderado es calificado de “malo” por el resto de los prospectos.
En ese contexto, garantizó que la coalición será respetuosa con todos los participantes en el proceso de selección, por lo que no se menospreciará a ningún perfil.
“Nosotros no llamamos cascajo a nuestros militantes, nosotros los respetamos, solo que no tenemos 2 mil 500 candidaturas, es la única diferencia (…) nosotros los respetamos y atendemos”, enfatizó.
Armenta aludió la declaración que realizó el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, en una visita a Puebla el 1 de marzo pasado, en la que tachó de “cascajo” a los liderazgos del Revolucionario Institucional que se separaron de ese partido, para sumarse a Morena en la presente elección.
En otro tema, el candidato a gobernador de Sigamos Haciendo Historia reveló que valora solicitar medidas de seguridad para hacer frente a la campaña electoral que iniciará el 31 de marzo próximo, porque previó un “ambiente complicado”.
