Las nominaciones al Golden Globes son ya del dominio de todos, pero procede comentar algunas cosas que llaman la atención o que (de menos) matizan esa lista; un ejercicio que rara vez se hace, privilegiando lo meramente “informativo” sobre los rasgos “analizables”, digamos. Veamos que resulta…
Lo primero a notar es que, de las 10 películas nominadas a ser la mejor del año –5 en drama y 5 en musical o comedia– 4 son producciones de plataformas de streaming: CODA, de Apple TV+, y El poder del perro, No mires arriba y Tick, tick…boom!, de Netflix. Ahora bien, siguiendo con las 10 aspirantes a mejor película, Belfast y El poder del perro justifican sus aspiraciones con 7 nominaciones –líderes absolutas de toda la baraja– pero no así CODA y Cyrano, que sólo suman una más a la de cinta (comedia) del año: CODA a actor de soporte (Troy Kotsur) y Cyrano a actor protagónico en un musical o comedia (Peter Dinklage). Duna, cuyo costo aproximado fue de 165 millones de dólares, sólo obtuvo 2 nominaciones adicionales a la de cinta (drama) del año: a director (Denis Villeneuve) y a música original (Hans Zimmer). (Por cierto, todo el dinero detrás de Belfast, de Focus Features, es del Reino Unido, sin inversión norteamericana alguna). En cuanto a las nominadas como película no hablada en inglés, muchos manejan los títulos, pero sin saber el país –o países– de procedencia: Compartimento 6, Finlandia-Rusia-Alemania; Maneja mi auto, Japón; La mano de Dios, Italia; Un héroe, Irán-Francia; y Madres paralelas, España. Además, algo inusual: sin que su ópera prima The lost daughter esté entre las aspirantes a mejor película, Maggie Gyllenhaal recibió la correspondiente nominación como directora, sumándose a Jane Campion (El poder del perro) como las dos mujeres en esta categoría.
En cuanto a las actrices protagónicas nominadas por un film de drama, se da algo sumamente curioso: ninguna de las cinco –Jessica Chastain, Olivia Colman, Nicole Kidman, Lady Gaga y Kristen Stewart, todas muy conocidas– fue escogida por un trabajo vinculado a alguna de las 10 películas aspirantes a la mejor del año. Jennifer Lawrence y Rachel Zegler, nominadas como actrices de un film musical o de comedia, enmendaron un poco esa plana al ser las protagónicas, respectivamente, de No mires arriba y Amor sin barreras. El caso de los actores protagónicos es distinto, puesto que seis de los diez nominados sí trabajaron para películas aspirantes a ser la mejor del año: Benedict Cumberbatch (El poder del perro), Will Smith (El Rey Ricardo), Leonardo DiCaprio (No mires arriba), Peter Dinklage (Cyrano), Andrew Garfield (Tick, tick…boom!) y Cooper Hoffman (Licorice pizza). Este último, por cierto, es hijo del fallecido Philip Seymour Hoffman, actor icónico de su generación. ¿Y algo que comentar en lo relativo a mejor canción? Sí claro; que en cuatro de ellas tienen que ver superestrellas de la música: Beyoncé Knowles (Be alive, de El Rey Richard), Van Morrison (Down to joy, de Belfast), Carole King (Here I am [singing my way home], de Respeto) y Billie Eilish (No time to die, de Sin tiempo para morir). La otra es Dos oruguitas, compuesta por Lin-Manuel Miranda para Encanto. Resulta extraño que ninguna de ellas corresponda a Tick, tick…boom!, el musical nominado, conscientes de que las canciones de Amor sin barreras fueron originalmente escritas para el film de 1961.
Netflix está pasando El poder del perro, Tick, tick… boom! y No mires arriba. En anteriores columnas comenté las dos primeras. No mires arriba, por su parte, detona desde una premisa aterradora: un cometa del tamaño del Monte Everest avanza directamente hacia la Tierra, con certidumbre al 100% de que va a extinguirlo en 6 meses y medio. ¿Qué hacen los dueños del planeta? Aprovechar la ocasión para ganar mucha, mucha plata…