Andrés Manuel López Obrador, el mayor líder social de los últimos tiempos en México, que logró movilizar a millones de mexicanos quienes aceptaron e impulsaron su liderazgo político y apoyaron su gestión tanto en la jefatura del entonces Departamento del Distrito Federal, como en el Poder Ejecutivo de la República, vuelve a cumplir su palabra y, como lo anunció al inicio de su encargo como Presidente de la República, ha rendido su último informe de su gestión y el próximo día primero de octubre se retira de toda actividad pública, y lamentablemente, volverá a cumplir lo que ha ofrecido.
Desde que AMLO triunfo en 2018, con la mayor votación que, hasta entonces, hubiera obtenido cualquier otro candidato presidencial, logrando 30. 9 millones de sufragios, convocó y llenó el zócalo de la Ciudad de México, por lo menos, 9 meses, y pudieran haber sido más y lo hubiera también desbordado.
Sus actos masivos, tenían una peculiaridad notable, se convocaban para conmemorar las victorias del pueblo o acontecimientos históricos que dieron rumbo al país, nunca las movilizaciones fueron para lanzar a sus seguidores contra otras fuerzas políticas, a pesar de las calumnias y la sucia campaña mediática emprendida contra el Presidente y su gobierno a lo largo de su gestión en el Ejecutivo, campañas, incluso, financiadas con recursos del exterior y la injerencia de embajadores como el de Estados Unidos y Canadá y unan derecha extraviada con los influjos de Vox, el partido español de extrema derecha y, ahora, reforzada por Milei, el Presidente argentino. Todo ello se reflejó puntualmente en los resultados de las elecciones del dos de junio de 2024, en las que Claudia Sheinbaum obtuvo cerca de 36 millones de votos, provocando una nueva crisis existencial en la derecha opositora, que perdía votos cada vez que hablaba mal de López Obrador.
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La primera de esas nueve veces que AMLO se reunió con el pueblo que lo llevó pacíficamente a la Presidencia, fue el primero de julio para celebrar su triunfo en las urnas; luego, en diciembre de ese mismo año la reunión se realizó para celebrar su toma de posesión; el primero de julio de 2019, se celebró un año del triunfo y unos meses después, el primero de diciembre, para festejar el primer año en la Presidencia de la República y recordar las luchas de tantos años hasta alcanzar la victoria. Vino la pandemia y se hizo un alto obligado ante los estragos que causaba el maligno virus. El primer acto masivo se llevó a cabo el 1 de diciembre de 2021, fecha del tercer aniversario de su gestión como mandatario de nuestra nación; el 27 de noviembre de 2022 el Presidente, quien sino él, realizó una marcha de 3.9 kilómetros del Ángel de la Independencia a la Plaza de la Constitución, marcha en la que AMLO caminó rodeado de una multitud de seguidores durante cinco horas y media. Esta emotiva movilización, cerró con un emotivo discurso; el 18 de marzo de 2023, la convivencia entre pueblo y mandatario, sucedió en el Zócalo, frente a Palacio Nacional, para conmemorar la expropiación petrolera y mostrar simbólicamente el camino a seguir: la soberanía nacional y la autosuficiencia energética.
En julio de ese año, se celebró el quinto aniversario del triunfo electoral y AMLO aprovechó para invitar a los miles de asistentes a estar con él un año después en su último informe de gobierno, lo que sucedió puntualmente, aunque ya adelantó el Presidente que el último y más grande acto masivo será el próximo 15 de septiembre cuando dé su último “Grito de Independencia.”
Sera, sin duda, una despedida muy sentida para un pueblo que adquirió rumbo con la Cuarta Transformación, que, como nunca, supo hacia donde iba con sus movilizaciones y construyó los instrumentos de apoyo a Morena, que comprendió las intenciones de su Presidente y dijo así apostando a su honestidad y patriotismo.
Presidente, lo vamos a extrañar.
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