La expresidenta municipal de Puebla Claudia Rivera Vivanco acusó al alcalde Adán Domínguez Sánchez y a su jefe político, Eduardo Rivera Pérez, de manejar a la ciudad como un “botín”, ante los problemas financieros que heredarán a la administración de José Chedraui Budib.
En conferencia de medios, explicó que el problema no sólo son los pendientes de pago por alrededor de 600 millones de pesos, sino también un crédito contratado al inicio de la administración por 160 millones de pesos del que no existe certeza de que haya sido liquidado.
En ese contexto, la actual diputada federal por Morena solicitó a la Auditoría Superior del Estado (ASE) realizar una fiscalización exhaustiva de la última cuenta pública de Domínguez.
Según la exalcaldesa, ya se han detectado irregularidades que deben ser investigadas a fondo y, en su caso, sancionadas tras el cambio de administración que se efectuará el 15 de octubre próximo.
De paso, calificó de inverosímil la declaración de Adán Domínguez de que el responsable de que se heredaran pendientes de pago por 500 millones de pesos fuera el tesorero del ayuntamiento, Omar Coyópol Solís.
“Yo sostengo que sí hay una responsabilidad, que sí hubo una intentona de querer endeudar nuevamente al ayuntamiento al término de la administración”, anotó.
Refirió que ella recibió en 2018 una ciudad endeudada, a la que se sumó una pandemia que generó una crisis económica mundial, no obstante, logró cubrir los pasivos que le heredaron las gestiones pasadas del PAN y del PRI.