Gabina Reyes Velázquez, quien ocupaba el puesto de secretaria en la Secretaría de Organización y Estadísticas del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz Volkswagen (SITIAVW), fue despedida el pasado 2 de junio, convirtiéndose en la quinta trabajadora separada del organismo gremial durante la gestión actual de Hugo Tlalpan. La exfuncionaria denunció que su salida careció de justificación, a pesar de sus 22 años de servicio continuo.
Velázquez relató a La Jornada de Oriente que la notificación de rescisión le fue entregada por Arturo Blázquez, asesor jurídico del sindicato, quien le indicó que debía reunir sus pertenencias y abandonar las instalaciones de inmediato. Afirmó que fue acompañada hasta la puerta por el abogado y por Víctor Hugo Maravilla, secretario de Interior y Actas, sin que se le permitiera dialogar sobre los motivos de su despido.
La exsecretaria, de 63 años, destacó que durante más de dos décadas nunca contó con un contrato formal, situación que, según explicó, es habitual entre el personal de confianza. Recordó que, en la administración de Rey David García Avendaño, la contadora Karina Avilés López, junto con el tesorero, intentó que los empleados firmaran contratos con reducción salarial, argumentando que se mantendrían los ingresos.
Karina Avilés López continúa en la actual gestión de Hugo Tlalpan y, según Velázquez, estas prácticas se han mantenido, afectando derechos laborales y prestaciones de quienes laboran bajo confianza.
La trabajadora atribuyó su despido a una política de discriminación por parte del comité sindical actual, encabezado por Hugo Tlalpan, y a una estrategia para remover a quienes colaboraron con administraciones previas. “Es discriminación, porque siempre que llega un comité nuevo, discrimina a quienes estaban antes”, manifestó. Agregó que el trato del comité actual ha sido distante y poco empático, en contraste con gestiones anteriores.
La afectada señaló que la razón oficial para su despido fue la acumulación de retardos, aunque consideró insuficiente esta causa, ya que en otros periodos se había mostrado flexibilidad ante situaciones similares. Además, denunció que la indemnización ofrecida representa apenas entre el 25 y el 30 por ciento de lo que corresponde por ley, por lo que exigió una liquidación justa y descartó la posibilidad de reinstalarse.
Velázquez indicó que su caso no es aislado, pues también han sido despedidas la secretaria de la Secretaría de Deportes y otros empleados, entre ellos vigilantes, sumando al menos cinco bajas en el sindicato.
El caso de Gabina Reyes Velázquez deja al descubierto la falta de contratos y la precariedad laboral dentro del propio sindicato, así como la necesidad de revisar las prácticas internas en materia de derechos laborales.