Un 70 % de las edificaciones en Puebla son autoconstrucciones que están en riesgo frente a un sismo de grandes dimensiones, reveló Alejandro Muñoz Muratalla, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles del estado de Puebla (Cicepac).
En conferencia de prensa precisó que estas construcciones se hicieron sin el respaldo técnico de un especialista, es decir, ingeniero o arquitecto, e incluso el 48 por ciento de estas cuentan con un daño en sus estructuras.
Te recomendamos: En los 217 ayuntamientos del estado se ejecuta obra sin planeación; urgen bancos de planeación: Colegio de Ingenieros
Tanto el presidente del Cicepac como Fernando Peña Fomperosa, integrante del colegio, destacaron que el riesgo de hacer una construcción sin la asesoría correspondiente es que se utilicen materiales de baja calidad o carezca de licencias de construcción.
“Todas estas cuestiones que no pasan por un filtro de profesionales aumentan significativamente la vulnerabilidad de estas viviendas. No afirmamos que estén mal construidas, pero al no haber pasado de las manos de un profesional es posible que no tenga licencia de construcción, lo que es también un filtro que asegura la calidad de las viviendas”.
Agregaron que el 48 por ciento de las autoconstrucciones ya tiene daños en sus estructuras generados por diversas circunstancias como son los sismos, así como haber sido construidas en superficies con cimientos deficientes o en zonas de riesgo.
“Lo que sucede en la actualidad es que los suelos planos se están acabando, nos estamos yendo más hacia las laderas. Todo este tipo de condiciones son las que abonan a que si no hay una intervención de un profesional tiene este tipo de problemas”, indicaron.
Expusieron que se habla de un universo aún no cuantificable de viviendas; sin embargo, se podría hablar de miles en todo el estado.
A través de un mensaje, el presidente del Cicepac, Alejandro Muñoz destacó que tras hacer análisis técnicos los integrantes del colegio concluyeron que Puebla no está preparada para un evento sísmico de gran magnitud.
“Los especialistas estamos trabajando en reducir los riesgos y la vulnerabilidad en pro de los ciudadanos. Los principales desafíos son los edificios antiguos del Centro Histórico que no cumplen con las normas sísmicas modernas y son vulnerables a los colapsos. Estamos trabajando en el mapeo de estas construcciones”, acotó.
Un segundo desafío lo representan las construcciones que en las periferias de la ciudad se levantan sin supervisión adecuada, ni con apego a los reglamentos de construcción, lo que las vuelve frágiles y riesgosas.
“En localidades alejadas la vigilancia de las normas de construcción y los criterios sísmicos no siempre se cumplen a cabalidad”, destacó.
Manifestó que otro desafío lo constituye la infraestructura crítica como hospitales, escuelas y puentes que han sido reforzados en algunos casos pero no de forma sistemática en todo el estado.
Te puede interesar: Colegio de Ingenieros Civiles propone la creación del Instituto para la Seguridad de las Construcciones