De los nueve pozos de riego en Cuapiaxtla, nada más funcionan dos, pues los restantes han sido desmantelados por la delincuencia; por ello, es importante la revisión que la Federación hará en cada uno para poner orden y para definir el volumen de aprovechamiento del agua por parte de concesionarios, aseveró Perfecto Barrales Domínguez, expresidente del Consejo Estatal del Sistema Producto Amaranto.
Recordó que el año pasado la Comisión Nacional del Agua (Conagua) le notificó la anulación de la concesión de 193 mil metros cúbicos de agua del pozo número 3, de ahí que los agricultores beneficiarios de esta infraestructura promovieron un amparo.
“No nos concedieron la suspensión, se va a otra instancia, pero parece que ya se congeló”, además, debido al Plan Nacional Hídrico (PNH) del gobierno federal se han generado varios cambios, según la Conagua, comentó.
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Por ello, el pozo ya no quedará sellado sino que se va revisar al igual que todos los que hay en el país, a fin de que el resultado determine si el volumen de aprovechamiento se mantiene, aumenta o se reduce, es decir, “vamos a comenzar de nuevo, de cero”, mencionó.
En este momento -subrayó-, se realizan gestiones ante la Notaría Pública para integrar una mesa directiva y se trabaja en reunir todos los requisitos pedidos por la Secretaría de Impulso Agropecuario (SIA) y Conagua, pero son muchos, a pesar que la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunció que habría una reducción en los trámites. “Tal vez nos llevaremos un año”.
Por ejemplo -agregó- la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) nos pide que estemos dados de alta como contribuyentes, pero el o los procesos más tardados serán los fedatarios, aunque son necesarios porque se debe nombrar a un representante legal.
Reconoció que esta revisión de pozo por pozo es benéfica “porque realmente muchos (beneficiarios) tienen miles o millones de metros cúbicos de agua concesionados, mientras que hay pueblos que no tienen ni para tomar”.
La clave -subrayó- en el campo es el agua, quien cuenta con ella también tiene negocio, independencia económica y futuro; sin ella, es sinónimo de pobreza”. Por eso, reiteró que las empresas de la región consumen altas cantidades de este recurso natural, “prácticamente se las estamos regalando y es de primera”.
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Agregó que dichas industrias utilizan volúmenes altos para elaborar productos que venden a otros país, “es decir -recalcó-, estamos exportando agua, por eso es la riqueza más importante” a nivel internacional.
Esas compañías no solamente contaminan los mantos acuíferos sino que gozan de concesiones “grandísimas” de alrededor de nueve millones de metros cúbicos al año, reprochó Barrales Domínguez.
“Por eso lo que hizo la presidenta de la República en su Plan Nacional Hídrico es un buen inicio para rectificar muchas cosas”, enfatizó el expresidente del Consejo Estatal del Sistema Producto Amaranto.
Asimismo, destacó que actualmente el pozo número 3 se encuentra “totalmente desmantelado, lo único que tenemos es la línea de conducción y la bomba sumergible, solo eso. Necesitamos rehabilitar todo”, enfatizó.
Sin embargo, a nivel municipal hay cerca de siete pozos desarmados “por los robos, nunca supimos quién fue, nada más iban por el cobre por el que les dan cualquier cosa”, por lo que solamente dos están en funciones, lamentó.
Consideró que es inexplicable que las autoridades no hayan identificado a las personas que han cometido este saqueo, a pesar de “la facilidad” para dar con su paradero en los lugares donde venden ese material. “Es algo sencillo”.
