Aveces se me hace extremadamente difícil definir lo que siento entre mis vicios y pasiones, pero aunque estoy seguro de que esta particularidad no constituye un rasgo privativo de mi persona, si se entiende como vicio a ésa costumbre, calificada socialmente como indecente, despreciable o inmoral, al grado de constituirse como una enfermedad, me declaro morbosamente (en el sentido patológico de la palabra) como un...